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BMW Track Trainer, el piloto automático para circuito

El Track Trainer de BMW es un dispositivo que memoriza el trazado de pilotos profesionales sobre un circuito. Es capaz de conducir de un modo plenamente automático siguiendo esa trazada gracias a un sistema de posición y sensores de a bordo que le permite avanzar sin necesidad de ningún tipo de manejo.

Con tan sólo sentarse y apretar un botón, el coche acelerará a fondo y, como por arte de magia, tomará de un modo profesional todas las trazadas del circuito. Además, ésta tecnología es capaz de memorizar el recorrido que realiza cualquier piloto. Así se puede cargar en un ordenador y ver dónde y porqué se han cometido los errores o aciertos.

Con este sistema se están impartiendo cursos de conducción. Las lecciones tienen lugar en el circuito de Spa de Bélgica, en el Español de Cheste y en Alemania en Hockenheim o en el de Nürburgring.

El conductor puede apoyar las manos sobre el volante para percibir la dirección. De esa manera recibe clases de primera mano sobre trazado en directo. Además, percibe todas las sensaciones que la conducción supondría. Con este material podemos decir adiós a las lecciones en pizarra o sobre papel y explicaciones verbales que tratan de aproximarse a las sensaciones de unas buenas trazadas.

El aprendizaje se compone de tres fases:

1- El BMW serie 3 conduce de modo automático. El conductor se memoriza la toma de curvas y se familiariza con el circuito y el vehículo.

2- Se toma el volante y unos LEDs indican la proximidad o lejanía de la trazada. Si la intensidad de la luz aumenta indica el error. Hay a derecha e izquierda del cuadro de indicadores para representar hacia donde se desvía del recorrido idóneo.

3- El conductor realiza en solitario y sin indicadores el recorrido. Tal que pueda poner en práctica de un modo más natural todo lo aprendido.

Durante todas estas fases el trazado es memorizado en un ordenador en el que posteriormente se podrá evaluar los resultados. Estos datos se visualizan en una animación en la que se representa el circuito y su trazada al igual que el coche. Se puede ver varias vueltas a la vez para contrastar y sacar conclusiones.

Funcionamiento tecnológico

La tecnología de a bordo se compone de una transmisión automática que usa un programa de estabilidad electrónico que registra la aceleración lateral y longitudinal. Está en comunicación a través de un ordenador con el sistema de que impulsa el vehículo.

En cuanto a la posición está el problema del margen de error de los GPS. En BMW trabajan con un sistema de corrección de datos CDGPS. Éste se sirve de una serie de recursos que confirman que la posición es la correcta con mucha más precisión ya que en un circuito un centímetro marca la diferencia. Se emplea para la corrección de datos una cámara que identifica el recorrido y lo compara con mapas de alta definición. También un escáner que identifica los bordes de la carretera.

El BMW Track Trainer se consolida como un hito que nos acerca a la conducción automática que pierde progresivamente los tintes de ciencia ficción. Además se aventura a la creación de vehículos más seguros en un futuro en el que conductor y vehículo perciban y tomen decisiones juntos.

Pero, con los pies en el suelo, aprovechando la capacidad de un automóvil para recorrer distancias por su propia cuenta, la división de BMW de Investigación y Tecnología ha desarrollado la conocida Parada de Emergencia. Si el conductor sufre un mareo el vehículo se detiene donde no hay peligro evitando así accidentes fatales.

Estas tecnologías provocan cierto recelo para los creyentes en el “placer de conducir” que resulta ser el buque insignia de la imagen de éstos alemanes: ¿te gusta conducir? Por ahora es un acierto ya que enseña a conducir bien y, además, puede salvar vidas.

Fuente: BMW

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