Finales de 2013 es la fecha en la que Volkswagen pretende comenzar las ventas de su primer Golf con propulsión 100% eléctrica. Pero la confirmación no abarca en exclusiva a esta variante, sino que además, el fabricante alemán también ha hablado sobre otra versión que está suscitando mucho interés por parte de los medios, hablamos sobre la variante híbrida enchufable del mismo Golf que se confirma que verá la luz en el año 2015.
Quizás resulte peculiar el hecho de atrasar en el tiempo la variante híbrida en favor de una comercialización más temprana de la opción eléctrica. Esta decisión puede responder a una apuesta por parte de la marca por mejorar la eficiencia de la gama de propulsores convencionales, incluyendo una mayor presencia de los microhíbridos, y así no canibalizar parte de la oferta al encontrar una atractiva opción híbrida.
Recordemos que Volkswagen acaba de presentar en sociedad su nueva de gama de propulsores, tanto en variantes diésel como gasolina. Las siglas TSI y TDI firmarán la totalidad de las versiones de los modelos de la casa de Wolfsburgo, y en concreto, la siguiente generación del Volkswagen Golf lucirá todas sus mecánicas bajo la estricta ley de la sobrealimentación y el empleo de soluciones tales como el sistema Start/Stop, la desconexión selectiva de cilindros, etc.
Dejando a un lado las apuestas sobre la futura oferta mecánica del compacto, la importancia del anuncio es bastante reseñable dada la repercusión del modelo Golf en número de ventas globales, y en especial al analizar los posibles rivales que podría encontrar a la hora de llegar al mercado. Pues hasta el momento no es posible encontrar un modelo que sea capaz de ofrecer distintos tipos de propulsión más allá de una opción híbrida.
Con este anuncio queda claro que la apuesta de Volkswagen con su modelo más importante es muy alta, quizás tardía respecto a otros fabricantes, pero posiblemente pueda convertirse en el primer fabricante en ofrecer en una misma gama hasta cuatro opciones de propulsión distintas: diésel, gasolina, híbrido y eléctrico. La única pregunta que queda en el aire es el precio final de las variantes que empleen propulsión alternativa, y si además las mejoras en eficiencia de los propulsores convencionales pueden reducir la teórica ventaja de las opciones más verdes.
Fuente: AutoblogGreen
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