París aprueba su tasa para expulsar de la ciudad a los SUV, ¿pero quién está en contra de los SUV?

Quieren acabar con los SUV y es por eso que harán la vida imposible, y muy cara, a sus conductores. Así decidí encabezar la que está siendo una de las noticias de la semana, y eso que esta acaba de comenzar.

Paris vota en contra de los SUV

París encarecerá las tarifas para el estacionamiento regulado a los SUV o, mejor dicho, a los turismos demasiado pesados, lo cual afecta en mayor medida a los SUV, e independientemente de que estos sean gasolina, diésel, híbridos, o eléctricos. Y lo hace después de que la medida salga adelante por un referéndum, con un 54,55% de los votos a favor.

¿Han decidido los parisinos «hacer la vida imposible a los SUV»? Y mejor aún. ¿Qué lecciones deberíamos aprender en otras ciudades españolas de lo sucedido en París?

La medida de París en contra de los SUV

Lo primero que vamos a hacer es resumir muy brevemente lo sucedido en París. Aunque ya hemos hablado largo y tendido de ello en este artículo sobre la medida en contra de los SUV, que comenzará a aplicarse a partir del 1 de septiembre:

• El consistorio parisino considera «SUV y los 4×4» un problema, alerta de cómo ha aumentado el tamaño y la masa de los coches y apunta que los «SUV y 4×4» son más peligrosos en caso de atropello y más contaminantes
• París propuso incrementar las tarifas de aparcamiento para los coches más pesados, que superen los umbrales de 1.600 kilogramos en combustión interna e híbridos y de los 2.000 kilogramos en eléctricos
• Las tarifas para los coches más pesados, generalmente SUV, triplicarán a las tarifas del resto de coches en los distritos del 1 al 11 (hasta 225 euros por aparcar 6 horas) y del 12 al 20 (hasta 150 euros por aparcar 6 horas)
• El Ayuntamiento de París propuso un referéndum en el que los vecinos de los distritos afectados validasen la medida
• La medida que penaliza sobre todo a los SUV ha salido adelante y a partir del 1 de septiembre se aplicarán las nuevas tarifas

El referéndum anti-SUV

El primer objeto de este artículo es analizar el referéndum en sí mismo, para entender si de su resultado se puede concluir que, efectivamente, los ciudadanos de París han votado en contra de los SUV. La pregunta que se consultó en el referéndum fue: «¿A favor o en contra de la creación de una tarifa específica para el estacionamiento de vehículos individuales pesados, voluminosos y contaminantes?» y las posibles respuestas «a favor», o «en contra», existiendo también la posibilidad del voto en blanco y el voto nulo.

A continuación algunos datos por los cuales, y sin restar validez al referéndum, sería difícil concluir que los ciudadanos de París, en general, han votado a favor de la denominada tasa de los SUV:

• La población de la ciudad de París es de 2,2 millones de habitantes (Insee), pero su área metropolitana se extiende mucho más allá de París, con una población que superaría los 14 millones de habitantes
• El referéndum se ha llevado a cabo en los distritos Centro (del 1 al 4 inclusive) y del 5 al 20. El censo del referéndum aplicaba a los ciudadanos censados en estos distritos, con un total de 1.374.532 personas inscritas en las listas electorales
• Del censo total, tan solo participaron en el referéndum 78.121 ciudadanos (5,7%)
• 42.415 electores votaron a favor (54,55% de los votos emitidos) y 35.340 (45,45%) votaron en contra, hubo 366 votos en blanco y nulos
• Del censo total que estaba llamado a participar en este referéndum solo el 3,08% de los censados votaron a favor de las nuevas tarifas para el estacionamiento regulado

¿Quién quiere acabar con los SUV?

El segundo objeto de este artículo es analizar los múltiples riesgos implicados a la hora de establecer medidas para regular el tráfico como estas y, sobre todo, de que esas decisiones se tomen por referéndum. La primera, a la vista de la participación en el referéndum de París, el de la legitimidad de la elección. La segunda, que puede ser más o menos discutible, que ciudadanos que puedan ser afectados por la medida no estén llamados a decidir por no residir en los distritos afectados.

La tercera, y no menos importante, es cómo un proceso de referéndum como este, que atañe a los coches más pesados y los SUV, puede estar afectado por otros sesgos políticos. El de la premisa que se expone en esta consulta y, sobre todo, el del sesgo que aplica por los ciudadanos que estén movilizados por la propuesta de referéndum, pero también el sesgo político de los ciudadanos que acudan al referéndum no tanto para expresar su opinión al respecto de lo que se propone sino para emitir un voto de castigo al que lo propone.

A continuación los resultados del referéndum, por distrito, y marcados en negrita los distritos en los que el resultado del referéndum fue «en contra»:

La regulación del tráfico en clave política

Desde algunos medios franceses se apunta (CNEWS, Le Parisien) al clima de división que ha generado esta medida, y el referéndum celebrado el pasado domingo, pero también cómo ha estado condicionada tanto por los partidarios de la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, como de sus opositores, que habrían votado en clave de voto de castigo.

Si contrastamos los datos del referéndum de ayer (Ayuntamiento de París) con los de las elecciones municipales de París de 2020 (Ministerio del Interior de Francia) nos encontramos con un dato aún más esclarecedor:

• Los únicos distritos que han votado en contra en este referéndum han sido los distritos 6, 7, 8, 15, 16 y 17
• En los únicos distritos en los que se votó en contra en este referéndum la lista de Anne Hidalgo no consiguió más del 36% de los apoyos en los comicios de 2020
• Los distritos en los que Anne Hidalgo consiguió menos del 36% de los apoyos en 2020 han sido los únicos que han votado en contra de la medida, el resto, en los que Anne Hidalgo consiguió un mayor apoyo, votaron a favor de la medida