Para muchos, la industria del automóvil chino es toda una zancadilla a la europea, especialmente porque, con sus competitivos precios, está haciendo que para la mayoría sea la única opción plausible. Al fin de cuentas los números hablan, y el receloso europeo que vela por su bolsillo ve mucho más lógico gastarse 22.990 euros en un BYD Dolphin que 36.000 euros en un Volkswagen ID.3 -precios en ambos casos con MOVES aplicado-. Y así lo avalan las 500.000 unidades que ya se han producido del compacto chino.
Y aunque bien es cierto que el Dolphin lleva relativamente poco en España, lo cierto es que su comercialización comenzó en agosto de 2021. Es decir, que en poco más de dos años ha conseguido un hito propio de vehículos que llevan mucho más tiempo a la venta, dejando patente que, nos guste o no, este coche encaja en el garaje de muchos habitantes.
BYD ya ha producido 500.000 unidades del BYD Dolphin
Pero, ¿cuál es la receta mágica del compacto eléctrico? Primero que la marca bajo la que se ampara es el mayor fabricante de vehículos electrificados. Y es que al fin de cuentas, BYD es un gigante que lleva muchos años en la industria, y producir sus propias baterías permite no solo reducir los tiempos de entrega de sus coches, sino también el precio final que paga el consumidor.
Segundo porque estamos ante un producto competente de la mano de una relación calidad-precio prácticamente imbatible ahora mismo en el segmento. Con todo ello, podemos escoger entre cuatro acabados -Active, Boost, Comfort y Design- y entre tres motorizaciones con potencias comprendidas entre los 95 y 204 CV y autonomías que van desde los 310 hasta los 427 kilómetros.
Lógicamente, los casi 23.000 euros que podemos pagar por el BYD Dolphin se aplican sobre la variante de acceso. Es decir, aquel equipado con el motor de 95 CV y el acabado Active, combinación que se traduce en un coche capaz de cubrir 340 kilómetros de autonomía junto a un equipamiento de serie conformado por elementos como llantas de 16 pulgadas, luces LED, cámara de visión trasera y de 360º, control de crucero inteligente, acceso sin llave, cuadro de mandos digital de 5 pulgadas y una pantalla táctil de 12,8 pulgadas.
En caso de optar por la mecánica intermedia, que declara 177 CV y 310 kilómetros de autonomía, el precio asciende 30.690 euros -23-690 euros con MOVES aplicado-. Y si decidimos ir a por el tope de gama, es decir, el BYD Dolphin con motor de 204 CV, autonomía de 427 kilómetros y acabado Design, el desembolso a afrontar es de unos igualmente interesantes 37.690 euros -30.690 euros con MOVES aplicado-.
Sea como fuere, lo que está claro es que el BYD Dolphin está cuajando a nivel mundial. De ello da constancia que, durante 19 meses consecutivos, fue el vehículo de segmento C más vendido en China. Además, BYD hace especial hincapié en su repentino éxito en Brasil, país donde la comercialización del Dolphin comenzó en junio de este año y ya se han fabricado más de 4.000 unidades.
Ante tal situación, son ya varios los fabricantes que aprietan el acelerador en busca de no quedarse sin su correspondiente trozo del pastel, derivando así en la concepción de rivales directos del BYD Dolphin que buscan ajustar su precio al máximo para poder ofrecerse como el ansiado coche eléctrico barato.
MG 4
Fabricado en China, el MG 4 es un coche eléctrico muy barato y de tamaño compacto, pero también con un diseño distinguido y atrevido, razonablemente espacioso para su tamaño y muy bien equipado de serie y tecnológico, con un habitáculo dominado por las pantallas, para su precio contenido.
Citroën C4 eléctrico
BYD Dolphin
Volkswagen ID.3
Probablemente fue el primer coche eléctrico de volumen y un producto que destaca por una carrocería compacta y cierta amplitud y espacio para su tamaño, siendo un coche eléctrico razonablemente barato para su espacio.
BYD Dolphin 
