¿Os acordáis de la versión Rallye de los Peugeot 205 y Peugeot 106? Eran consideradas los «Porsche 911 GT3 RS» de los utilitarios deportivos, gracias a su naturaleza espartana. No montaban los motores más potentes de la gama, pero eran extremadamente ligeras y tenían muy poco equipamiento. Aun siendo coches de calle, su puesta a punto era deportiva y por ello, eran bases excelentes para crear vehículos de competición por poco dinero. Hace décadas que Peugeot no vende un coche de calle con apellido Rallye de forma oficial.
Y sigue sin hacerlo. Pero entonces, ¿qué es el Peugeot 208 Rallye que aparece en mi pantalla? Se trata de un homenaje en clave moderna a los 205 Rallye y 106 Rallye por parte del concesionario suizo Swiss Garages Hotz SA. Sin embargo, tenemos que dejarlo claro desde un principio: el homenaje es espiritual, ya que las únicas modificaciones que este 208 recibe son estéticas. No existe aligeramiento alguno, no emplea una mecánica diferente a otros Peugeot 208 y decididamente, no es un coche pensado para ser transformado en un vehículo de competición.
Fotos del Peugeot 208 Rallye
Aun así, estéticamente el homenaje roza la perfección. Sus llantas de chapa de 16 pulgadas y color blanco aportan un aspecto deliciosamente «retro», y la carrocería está adornada con vinilos de color azul, rojo y amarillo, los mismos que empleaba Peugeot-Talbot Sport en sus coches más deseados. En el pilar C un emblema específico nos deja ver que este coche es un «208 Rallye», tal y como lo hacían unas pegatinas específicas en los 205 y 106. En el interior, tenemos acentos rojos en el volante, pomo del cambio y pespunte de los asientos.
A nivel técnico, el coche emplea una mecánica sencilla: un 1.2 PureTech de 100 CV, asociado a un cambio manual de seis relaciones. No tenemos nada en contra de esta mecánica, pero en un verdadero Rallye, estaría asociado a una construcción especialmente ligera y a una puesta a punto diferenciada. Técnicamente, este 208 es como cualquier otro. No es deportivo, pero homologa 5,7 l/100 km de consumo y tiene un equipamiento amplio, en el que incluso tenemos una pantalla de 7 pulgadas compatible con Apple CarPlay y Android Auto.
En cualquier caso, hay que recordar que este coche es lo más cerca que estaremos de un 208 Rallye. Quizá con una suspensión roscada, unos baquets y una reprogramación de motor podríamos acercarnos al espíritu de los 106 y 205 más puristas. Desgraciadamente, Peugeot es una marca tremendamente sensata a día de hoy, y la actual generación del 208 carece – y carecerá – de versiones deportivas. Este homenaje por parte del concesionario suizo cuesta 24.500 francos suizos, al cambio actual, casi 25.500 euros.
Fotos del Peugeot 208 Rallye