Fisker, el farbicante autor de los modelos Karma y Atlantic, deja entre ver la idea para fabricar un rival directo al Chevrolet Volt apostando por el mismo diseño de eléctrico de autonomía extendida. La experiencia de Fisker como constructor de este tipo de automóviles, junto con la ausencia de diseños relacionados con este tipo de movilidad eléctrica en el mercado, estarían consiguiendo que la marca norteamericana se plantee muy seriamente la llegada a un segmento inferior al futuro Fisker Atlantic.
Esta nueva apuesta tendría mucho que ver con la entrada del ya cesado CEO de Fisker, Tom LaSorda, el cual pretendía buscar durante su corto mandato un grupo automovilístico que se uniera a la compañía norteamericana para la cooperación en el desarrollo de una nueva plataforma, supuesta nueva plataforma P, junto con la creación de un modelo capaz de ser co-desarrollado y puesto a la venta de manera conjunta entre varias firmas.
Fisker Karma, Fisker Atlantic y Fisker ¿…?
Este grupo en búsqueda y captura tiene todas las papeletas para que un futuro próximo se materialice en la asociación Fiat-Chrysler, grupo del cual Tom LaSorda salió como presidente de Chrylser e íntimo amigo del presidente actual del grupo italo-americano Sergio Marchionne. Ante la rotunda ausencia de un programa alternativo en este grupo, la alianza con Fisker serviría a ambas firmas para encontrar financiación y reducir los tiempos de desarrollo para una gama eléctrica.
Ahora, con Tony Posawatz como actual CEO de la firma, el Chevrolet Volt es el vehículo que ha fijado Fisker en su punto de mira, aunque más concretamente podría decirse que el verdadero rival de este futuro Fisker en el segmento D no sería otro que la variante premium del Chevrolet Volt, el también futuro Cadillac ELR. Hay que recordar que Fisker imprime una filosofía premium a sus modelos, siendo sus principales rivales las marcas alemanas en cuanto a terminación, calidad y prestaciones.
Este nuevo movimiento a la baja dentro de la gama responde a la necesidad ingente de que la marca Fisker encuentre una cuota de mercado capaz de mantenerla a flote, el Fisker Karma ha servido como modelo Halo capaz de esgrimir todos los detalles que hace suyos el fabricante, sin embargo, a la hora de vender resulta inevitablemente más atractivo contar con una gama de idéntica concepción pero situada en segmentos con mayor repercusión a nivel de ventas como el segmento E, donde aterrizará el Fisker Atlantic, y el segmento D, donde está previsto que llegue el tercer modelo de la marca.
Fuente: Inside EVs
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