Investigadores de la Universidad Tecnológica de Chalmers en Suecia han estudiado la conductividad térmica del Grafeno como solución para conseguir mejores tasas de disipación en componentes electrónicos. Con una creciente escalada en los requerimientos de potencia y capacidad y una construcción cada vez más reducida, la temperatura sigue presentándose como el principal problema a combatir en los circuitos electrónicos.
La investigación ha conseguido una reducción de la temperatura en los ensayos de hasta el 25% implementado una capa de Grafeno en elementos electrónicos fabricados con Silicio. Con esta mejora se permite aumentar el rendimiento de los sistemas y la tolerancia de los mismos ante circunstancias de funcionamiento extremas por uso o ambiente. En los vehículos eléctricos supondría un gran aliado en la mejora en eficiencia en materia de conversión de corriente.
El problema de la temperatura
La movilidad eléctrica cuenta con un enemigo muy importante en los procesos de transformación eléctrica: la ineficiencia. Un concepto que se aplica en todos y cada uno de los procesos que son necesarios para restaurar la energía que es capaz de almacenar una baterías. Desde la acometida de la red hasta la entrega final sobre el propulsor eléctrico, las pérdidas energéticas pueden sobrepasar fácilmente el 40%.
Uno de los grandes problemas de esta falta de eficiencia es la temperatura que han de sufrir todos los componentes durante los procesos de transformación. Inversos/convertidor y baterías son los principales elementos que sufren de este mal asociado a la temperatura que eleva la resistencia interna de los elementos y dificulta la estabilidad de todo el conjunto para limitar las pérdidas.
La actual dependencia del Silicio como base para la construcción de componentes electrónicos sigue teniendo a la temperatura como el principal enemigo de ineficiencia, fallos o reducida vida útil en sistemas. Con la llegada de nuevas soluciones basadas en Grafeno, se podría aumentar la capacidad de los actuales diseños, mejorando la construcción y posibilidades de futuros circuitos.
Fuente: GreenCarCongress
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