En los últimos días me he encontrado en varias ocasiones con varias personas que me han preguntado sobre las bondades del nuevo Mazda MX-5 y en varios de estos casos haciendo hincapié en cómo de bien resuelta estaba la alternativa menos potente, el Mazda MX-5 1.5 de 131 caballos. Una duda lógica, ¿son suficientes 131 caballos para el nuevo Miata?
Claro que no es el súmmum de las prestaciones con 131 caballos… pero tiene una natural dinámica de lo más divertida:
Por supuesto para una conducción relajada, como coche destinado a algún que otro paseo dominical más allá de su posible uso diario, esta alternativa cumple con creces, ahora bien, si buscamos una conducción más pasional, una conducción más espirituosa…
Cumple y lo hace no precisamente “por los pelos”, ofreciéndonos una grata respuesta, buscándonos en la parte alta del tacómetro, ofreciéndonos un buen paso por curva y una bonita banda sonora metálica, el ya conocido buen tacto del cambio, vibrante, duro y de cortos recorridos, esa evidente agilidad…
Sí, el motor 1.5 atmosférico de 131 caballos es más que suficiente para una conducción deportiva, pero evidentemente no me estoy refiriendo a esa conducción deportiva de ir a por la décima, sino a la conducción deportiva de escoger tu tramo de montaña favorito, de escoger una mañana de un fin de semana cualquiera y regresar a casa bien contento con tu coche, con lo que es capaz de ofrecerte.
Es divertido, bien divertido, ya con esta mecánica, no se nota perezoso, no decepciona, pero claro, para aquellos que busquen un poco más está la alternativa de 160 caballos, el 2.0 también atmosférico que no supone un desembolso excesivo.
Si atendemos a la gama del Mazda MX-5 nos encontramos con que entre el Mazda MX-5 de 131 caballos y el de 160 caballos hay una diferencia de 2.800 euros, costando 25.000 euros el primero, con el acabado Style y 27.800 euros el segundo, con el acabado Style+, contando en este último caso y entre otros detalles con tapicería en cuero, sensores de luz y lluvia, asientos calefactados, diferencial autoblocante y barras de torsión. El 131 caballos es más que suficiente sí, pero el 160 caballos es realmente tentador por este precio si tenemos en cuenta no sólo la potencia extra, sino también el equipamiento adicional.
Claro que el 160 caballos se siente más deportivo, más capaz. No sólo tiene 30 caballos más, tiene también una mejor puesta a punto en la que se incluye el diferencial, pero si no estas dispuesto a pagar esos 2.800 euros extra o simplemente prefieres gastártelos en equipamiento el 131 caballos cumplirá tus ansias de una animada conducción. Qué bonito y natural sonido, qué buena comunión con el volante y qué, además, buena opción para el día a día.
No te pierdas nuestra prueba del Mazda MX-5:
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