ESPACIOS
Cerrar CERRAR
Competición

4 MIN

Completada la tercera semana de test del Toyota Yaris WRC 2017 en España

Con marcas en su carrocería, testigos de los cientos de kilómetros acumulados en tierras españolas, los pasos de rueda remendados con ese eterno compañero en competición que es la cinta americana y el inamovible y misterioso mensaje en la ventanilla trasera en forma de fórmula matemática cuyo resultado no es otro que infinito. Toyota GAZOO Racing sigue en España sumando días de test con Juho Hänninen a la cabeza, dejando sensaciones aún mejores que las desprendidas en los primeros test.

Lo cierto es que el Yaris WRC sigue resultando extraño. La estética es muy agresiva para lo que estamos acostumbrados a ver en el pequeño modelo japonés, muy cercana a esa exagerada costumbre tunera que está de moda en el país del sol naciente entre algunos jóvenes y que adorna con desmesurados alerones hasta el más sencillo de los turismos.

En el automovilismo se suele decir que para tener un coche competitivo primero hay que hacerlo rápido y después ya se buscará la fiabilidad

Si exteriormente no parece estar en la velocidad del Polo R WRC o del Citroën C3 WRC, también es cierto que no hemos visto al Toyota rodar en tramos rápidos, al menos no tanto como en el caso de los alemanes y de los franceses a los cuales ya hemos podido otear tanto en Portugal como en Finlandia.

Lo que sí hemos visto al Toyota durante esta tercera semana de test en España ha sido saltar. Hänninen ha probado a conciencia las suspensiones firmadas por BOS, con la contrastada experiencia de Thierry Viardot y con el objetivo de hacer lo más competitivo posible al Yaris dentro de este apartado tan vital en el actual Mundial de Rallyes.

Con las mecánicas tan igualadas, todas ellas siguiendo unas directrices bien marcadas, tanto la tracción como las suspensiones (las cuales también condicionan mucho el primer factor) son elementos claramente diferenciadores en esta ecuación del WRC.

También lo es la fiabilidad. En el pasado, con los Grupo B, estábamos acostumbrados a ver como en cada rally un par de candidatos a la victoria terminaban rompiendo el propulsor de su coche. En la actualidad, los equipos no se permiten errores y es difícil ver abandonos por motivos relacionados directamente con una rotura de motor.

Es por ello que alarmó ver a los de Tommi Mäkinen con tantos problemas en su primera visita a nuestro país, tanto en el apartado de la caja de cambios como en el del motor. Sin duda, el cuatro veces Campeón del Mundo de Rallyes hará suya el habitual dicho que reza que para tener un coche competitivo primero hay que hacerlo rápido y después ya se buscará la fiabilidad.

Mientras tanto, seguimos esperando la decisión sobre los tres pilotos que se encargarán de llevar las tres unidades de Toyota desde el próximo Rallye de Monte-Carlo. Hasta el momento, Juho Hänninen ha sido el que ha sonado con más fuerza, ya que obviamente es el que más kilómetros lleva al volante del propio coche y está llevando buena parte del peso del desarrollo mientras que en Finlandia se está realizando un programa de test paralelo con el otro vehículo de test.

En Cerdeña empezaron a sonar algunos rumores sobre un posible tanteo a Andreas Mikkelsen, el cual debería tener su asiento en Volkswagen asegurado, pero al que muchos insisten en condicionar al hecho de que la FIA introduzca o no la nueva normativa de los tres pilotos puntuando.

Desde aquí agradecer a Lluis la cesión y el permiso para compartir con vosotros sus imágenes de dicho test, las cuales nos permitirá seguir apreciando la evolución de las formas del Toyota Yaris WRC17.

Cargando...