La Agencia Mundial Antidopaje había iniciado una investigación sobre la librea que exhibe la escudería Haas F1 esta temporada puesto que sus colores semejan a la bandera rusa y sobre los atletas profesionales de dicho país pesa una suspensión de dos años en los cuales no podrán representar a su nación en cualquier campeonato mundial. En este caso, se analizó el caso Nikita Mazepin y el patrocinio de Uralchem ya que supuestamente evadían las sanciones.
Cuando se presentó en público el VF-21, este año la escudería se inscribió como Uralkali Haas F1 Team, de inmediato se elevó el caso al Tribunal de Arbitraje Deportivo por la prohibición impuesta a Rusia por el escándalo de dopaje en los Juegos Olímpicos de Invierno de 2014. Se denunció que Nikita Mazepin competiría en la Fórmula 1 con la bandera rusa presente en el monoplaza. Pero en primera instancia, la FIA determinó que la librea no quebranta las sanciones porque tanto la bandera rusa como la de Estados Unidos tienen los mismos colores.
Se entiende que la disposición de colores hace referencia al capital ruso proveniente de Uralchem, pero, según los representantes de la FIA, no hay manera de comprobar, de forma determinante, que utilizar el azul, el blanco y el rojo en un coche infringe la orden emitida por el Tribunal de Arbitraje Deportivo. Si la FIA no se pronunció en contra de la propuesta de Haas F1, en realidad no se puede prohibir que ninguna escudería utilice en su librea los colores antes mencionados, no tiene sentido que otras organizaciones, como la AMA, pretendan revertir una decisión que no les compete.
Vía | Formula1News.co.uk
