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Superdeportivos con cambio manual, una especie en extinción

Hace unas horas conocíamos los primeros datos del lavado de cara del Audi R8, que recibe numerosas mejoras a mitad de su ciclo de vida. Una de las más importantes y comentadas es la introducción de la caja de cambios de doble embrague S-Tronic, que viene a sustituir a la robitozada R-Tronic disponible hasta ahora. La firma de los cuatro aros ha decidido además mantener la caja de cambios manual para aquellos que prefieran este tipo de transmisión, ofreciendo al posible comprador una variedad cada vez más difícil de encontrar en el mercado.

Todos hemos sido testigo en los últimos años del giro que ha dado la presencia de cambios manuales en los superdeportivos. Si bien hasta hace unos años era relativamente común que estos coches ofrecieron caja de cambios manual, el desarrollo de cajas automáticas cada vez más rápidas y eficientes hace que el típico palanca de cambios esté dejando paso a un pomo, una ruleta o una botonería para accionar la transmisión automática. Y la tendencia apunta a que en los últimos años este hecho se acentuará.

Casos como el de Audi serán cada vez más extraños de ver, ya que cada vez más marcas y modelos incorporan únicamente cajas automáticas, si bien aún queda algún reducto de superdeportivos con cambio manual. Desde Diariomotor hemos querido aprovechar para hacer una pequeña recopilación de los superdeportivos que se ofrecen con los dos tipos de cambio en el mercado, y también haremos mención a los principales modelos que sólo llevan automático o bien manual.

Porsche, la marca más fiel a la dualidad

Audi es la marca que nos ha dado pie a hablar en la dualidad de cambios automáticos en el segmento de los deportivos y los superdeportivos, pero ello no implica que sea el ejemplo perfecto. Hasta hace poco, la marca ofrecía el Audi S4 y el Audi S5 con cambio manual o cambio automático S-Tronic, pero con el nuevo lavado de cara han decidido eliminar esta posibilidad, dejando sólo el doble embrague como opción. Exceptuando el nuevo Audi R8 2013, el Audi TTS y el Audi TT RS, el resto de modelos de las gamas S y RS se ofrecen exclusivamente con cambio S-Tronic.

Sin salirnos del Grupo VAG, nos encontramos en la marca Porsche un ejemplo perfecto de esta dualidad. Los dos últimos lanzamiento de la marca (Porsche 911 991 y Porsche Boxster) se ofrecen en todas sus variantes disponibles hasta ahora tanto con cambio manual como con cambio automático, y probablemente ocurra lo mismo en las próximas variantes que lleguen al mercado, especialmente del 911. Lo mismo ocurre con todas las variantes del Porsche Cayman. En el caso de varias variantes del Panamera y el Cayenne, así como de las versiones más bestias del 911 997 que aún se encuentran a la venta, sólo se ofrece un tipo de cambio, pero no tiene tanto peso en este análisis puesto que las variantes 997 están a punto de desaparecer del mercado y los Panamera y Cayenne no son deportivos puros.

Aston Martin es otra de las marcas que apuesta por la dualidad en sus modelos, aunque cada vez menos. En la actualidad, el mítico Aston Martin DBS se ofrece tanto con caja manual de seis velocidad como con una automática secuencial, aunque está a punto de desaparecer del mercado en favor del Aston Martin Vanquish. También podemos por los dos tipos de transmisión en el Aston Martin V8 Vantage, en su versión más básica y tanto con carrocería coupé como descapotable. En el caso de Lotus, el Lotus Evora ha incorporado hace unas meses una caja de cambios automática que se une a la manual ya ofrecida anteriormente.

El otro gran superdeportivo que se puede adquirir con ambos tipos de caja es el Lamborghini Gallardo, algo que durará hasta que la firma italiana lance el reemplazo de este modelo, ya que hace tiempo ya anunciaron que van a renunciar a las cajas manuales. Mención especial merece Chevrolet, que tanto en su Chevrolet Camaro como en el Chevrolet Corvette Grand Sport ofrece los dos tipos de cambio. El gran BMW M3 también se oferta con dos tipos de caja, una manual y otra automática. Curioso es el caso del BMW M5, que en Europa se ofrece sólo con cambio de doble embrague pero en EEUU se ofertará también con caja de cambios manual.

Maserati también dice vender caja manual en el GranTurismo, pero en realidad es una caja robotizada. Por otra parte, Pagani y Koenigsegg van a seguir el ejemplo de Lamborghini. Estas dos firmas de superdeportivos de infart,o que en sus inicios ofrecían versiones manuales y automáticas de sus modelos, han sucumbido a los encantos de las nuevas cajas automáticas y sus actuales modelos sólo se ofertan con caja automática secuencial y de doble embrague, respectivamente.

Nuevo Ferrari F12 Berlinetta

Los superdeportivos automáticos han llegado para quedarse

Hace unos pocos años se temía que la llegada en masa de superdeportivos con cambios automáticos haría que se perdiera parte de la esencia y el encanto que este tipo de vehículos atesoran, pero esa situación ya se ha alcanzado con marcas como Ferrari, y de momento parece que no se ha acabado el mundo. La firma italiana ofrecía hasta hace unas semanas el Ferrari 599 GTB Fiorano con cambio manual o automático, pero el cese de su producción hace que ahora toda la gama cuenta con cambio automático. Las ventas de sus coches no se han resentido lo más mínimo, por lo que parece difícil que la marca vuelva a la palanca de cambios. El Lamborghini Aventador también se ofrece exclusivamente con una caja automática ISR, más ligera y rápida que una de doble embrague. El McLaren MP4-12C es otro de los que se une al club de los automáticos, al igual que el todopoderoso Bugatti Veyron o el archiconocido Nissan GT-R.

Cambio automático superdeportivo

No podemos olvidarnos tampoco de la gama AMG de Mercedes al completo, que no tiene ni una sola variante de cambio manual. Como ya dijimos anteriormente, casi todos los Audi S y RS tienen cambio automático y, en el caso de los M de BMW, todos montan cambio automático a excepción del M3 (el BMW Serie 1 M Coupé ya no se fabrica). En este apartado podemos seguir incluyendo versiones deportivas de modelos más convencionales, como por ejemplo el Mitsubishi Lancer Evo, el Lexus IS-F, el Jaguar XFR, los Jaguar XKR y XKR-S… En otro peldaño superior, todos los Maybach, Bentley y Rolls-Royce se ofrecen con transmisión automática.

Muchos CV y cambio manual, algo cada vez más difícil de encontrar

La principal conclusión que estamos sacando de este análisis es que los cambios manuales son cada vez más difícil de encontrar en los superdeportivos. No obstante, hay numerosos iconos que siguen apostando por esta pureza, sin ninguna posibilidad de cambio automático. Uno de los últimos en llegar ha sido el SRT Viper, que apuesta por una caja de seis marchas para transmitir a las ruedas traseras los 640 CV de su motor V10. Y en EEUU también nos encontramos el Corvette ZR1, con 638 CV digeridos por una caja manual de seis relaciones. En el país norteamericano sigue habiendo mucha tradición de cambios manuales, incluso en bestialidades como el SSC Tuatara o el Hennessey Venom GT.

Cambio automático superdeportivo

En un escalón más terrenal nos podemos encontrar al Lotus Elise y el Lotus Exige, ambos equipados exclusivamente con cajas manuales. Otro vehículo divertido de conducir con palanca de cambios es el Subaru Impreza WRX STI, y otras joyas como el KTM X-Bow o los Caterham también apuestan por las tradicionales cajas manuales. No podemos dejar de lado el espectacular Aston Martin V12 Vantage, ofrecido exclusivamente con caja manual, al igual que coches más mundanos como el Mini John Cooper Works o el Nissan 370Z.

Si revisamos la lista de las principales marcas, vemos que es muy difícil encontrar cambios manuales, e incluso para rellenar esta sección he utilizado ejemplos de coches que no son superdeportivos como tales, sino coches más mundanos y asequibles (a los cuales podríamos sumar el Subaru BRZ/Toyota GT-86 o el Renault Megane RS). Por tanto, podemos concluir que los cambios manuales están condenados a ir perdiendo protagonismo en los coches más prestacionales, dejando paso a las cada vez más rápidas, eficientes y ligeras cajas automáticas, bien de convertidor de par tradicionales o bien de doble embrague.

Personalmente, yo era de los que veía la llegada de las cajas automáticas como una pérdida de pureza en los superdeportivos pero, después de haber podido comprobar las bondades de este tipo de cajas en modelos como los últimos Mercedes AMG, el apoteósico Nissan GT-R o el Porsche 997 Turbo (en algunos de ellos como acompañante, desafortunadamente), no queda más remedio que plegarse a las evidencias y reconocer que estas cajas automáticas tienen todos los visos de ganar aún más cuota de mercado entre los superdeportivos.

En Diariomotor: Los cambios manuales están en peligro de extinción

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