Cine y coches: Estas son las películas que os recomendamos para la cuarentena

Queda todavía por delante unos días más de confinamiento y cuarentena, por lo que es un buen momento para seguir proponiendo distintas formas para poder invertir nuestro tiempo y poder mantener la mente distraída en esos momentos en los que se nos empiece a echar la casa encima. Hoy toca hacer un repaso a las películas de coches que nos han enamorado a lo largo de la historia del cine, e incluso aquellas menos favorecidas que al menos consiguieron entretenernos de principio a fin. Os recordamos que los comentarios están abiertos para que todos podáis aportar vuestras propias sugerencias y así ayudar a hacer más llevadero este momento.

Las imprescindibles para esta cuarentena:

Coge lápiz y papel porque aquí os vamos a dar un grupo de nombres que deberéis tener en cuenta a la hora de organizar vuestro tiempo frente al televisor durante esta semana. Una de las ultimas en llegar junto a ‘Go Karts!’, la aclamada ‘Le Mans’66’, es un buen ejemplo de que se puede conseguir un buen equilibrio entre realidad y producto que atraiga también a un público más generalista sin llegar a decepcionar por completo a los más Petrolheads. A ella debemos recomendar obviamente la ‘Rush’ de Ron Howard que nos trajo la batalla entre Lauda y Hunt tanto fuera como dentro de la pista y aquella temporada que marcaría la carrera deportiva de ambos. En 202 se debería estrenar la película de Keanu Reeves, ‘Rally Car‘ en la que se pone en la piel de un piloto de rallyes, así que veremos si la tendencia sigue siendo positiva.

Los dos son perfectos ejemplos de que se pueden hacer películas modernas que cumplan con el objetivo de llevar el automovilismo incluso para aquellos que nunca se han interesado. Pero esto lo podemos hacer extensible también a nuestras recomendaciones del pasado, empezando por ‘Le Mans’ de Steve McQueen, la noventera y muy entretenida ‘Días de Trueno’ de Tom Cruise como representante de la NASCAR junto al ‘Último héroe americano’. ‘Winning’ se ambienta en la Indy 500, con el papel destacado de Paul Newman, completando nuestra triple corona particular junto a la maravillosa ‘Grand Prix’.

Sin embargo, hay cine más allá de las carreras, por lo que también es importante encontrar esas otras obras que nos puedan mantener pegados a las pantallas o, que al menos, nos hagan olvidar la actual situación de cuarentena durante unos minutos. Esto es todavía mejor cuando añadimos el factor coche, algo que hace todavía más interesante la fórmula. En este orden, hemos tenido algunas películas destacables durante la pasada década, con historias alternativas como ‘Getaway’, ‘Baby Driver’ o ‘Drive‘ que también se dejan ver con una persona no aficionada al motor, aunque orientadas todas ellas para un público objetivo distinto en función de la acción y la crudeza de cada título.

Clásicas. Una obligada mirada al pasado:

En el apartado clásico hay una serie de películas que debes ver si te consideras un gran apasionado por las carreras. Está claro que a los más jóvenes puede que les rechine frente a las nuevas superproducciones de Hollywood, muy apoyadas en los efectos digitales que ayuden a hacer la experiencia más espectacular, pero es el apartado clásico el que suele sacar más partido de la profundidad de sus guiones, respectivas historias o personajes. Desde la década de los setenta las salas se llenaron para ver historias como ‘Gone in 60 seconds‘ (unos años más tarde, ’60 Segundos’ con Nicolas Cage y Angelina Jolie también se dejaba ver), la saga ‘Cannonball’ con Burt Reynolds, ‘The Italian Job‘ o la creación de un personaje en torno a la figura del escarabajo con ‘The Love Bug’ y ‘Herbie Rides Again‘.

No podemos olvidarnos de otras producciones que, si bien no se les puede considerar como películas de coches, obviamente estamos frente a algunas de las escenas que incluyen automóviles que han pasado a la historia del cine. En este punto es inevitable no destacar a la afamada persecución de ‘Bullit’, o la de ‘Ronin’, así como todos los encuentros entre el respectivo malo y el agente 007, James Bond. Incluso podríamos encuadrar ‘El arte de vivir bajo la lluvia’ como un largometraje con las carreras como trasfondo, pero con un toque dramático que nos mantendrá enganchados. La locura de ‘Mad Max’, o la cada vez más deformada trama de la saga ‘The Fast & The Furious’, la cual ha ido obviando que lo que hizo especial las primeras entregas fue precisamente ese novedoso ambiente de carreras, convirtiéndose en otra película más de acción con el paso del tiempo.

Divertidas, sórdidas o incomprendidas:

Nos encantan los coches, nos encanta la competición, pero dentro de este espectro en el que más o menos tenemos unos gustos homogéneos, cada uno tenemos nuestra propia aproximación al mundo de las carreras. Esta idea es aún más complicada cuando un director de cine quiere reflejar su idea de este deporte o de una historia de coches que enganche. Llegados a este punto, la premisa en muchas ocasiones se queda por el camino, por lo que nos encontramos con resultados tan peculiares como la saga ‘Death Race‘ a cada cual más disparatada hasta llegar a esa especie de ‘back to basics’ que se presentó en 2017 con ‘Death Race 2050’ en la que el homenaje a la película de 1975, ‘ Death Race 2000’ se convierte en un tributo de mal gusto.

A partir de ahí depende obviamente de cada sujeto. Habrá gente que pueda asimilar de mejor forma películas sobre carreras como ‘24 Horas al límite‘ en la que se nos presenta la figura del mítico héroe de cómic Michel Vaillant, ‘Driven’ de Silvester Stallone y la escena de los monoplazas de la Indy levantando alcantarillas sin soldar, o películas más recientes como la película francesa ‘Overdrive’ y la llegada de Aaron Paul como protagonista de la adaptación del popular nombre de videojuegos a la gran pantalla, ‘Need for Speed‘.

‘Taxi’ nació como una película distinta, con un humor canalla, muy propio de la cultura marsellesa e incluso con grandes cameos como el de Jean-Louis Schlesser y el Peugeot 306 Kit Car. La saga ha llegado a acumular hasta cinco películas (más la estadounidense), pero obviamente la última entrega, ya sin Samy Naceri, no mantiene el mismo aroma con el que nos sorprendió en sus inicios. También JohnTravolta intentó dar un giro a su carrera con su presencia en la reciente ‘Trading Paints‘, que nos sitúa en el mundo del dirt estadounidense, aunque sin demasiado éxito de crítica, mientras que ‘Dirt’ de Kevin Dillon sí que consiguió unos resultados ligeramente mejores ambientándose en los Trophy Trucks. ‘Talladega Nights: The Ballad of Ricky Bobby’ o ‘Pasado de vueltas‘ en España, fue una aproximación distinta al mundo de la NASCAR, con el ya asentado dúo cómico formado por Will Ferrell y John C. Reilly. Que nadie espere una película de carreras, esto no deja de ser comedia.

Prácticamente desconocidas en nuestro país:

Con acento extranjero. Es cierto que han tenido un recorrido ciertamente limitado, pero no son pocas las películas que han llevado a la gran pantalla el profundo amor que sienten por las carreras países como Japón o Italia. Llegados a este punto, siempre se debe lamentar que con el paso de los meses no hayan llegado propuestas entretenidas a nuestros cines dobladas al castellano, pero con el auge de las compras OnLine, es cada vez más sencillo acerté con la V.O. en DVD de algunas de las joyas relacionadas con competición que han salido en otros rincones del planeta.

‘Over Drive’, la película japonesa sobre el mundo de los rallyes, ‘Veloce come il vento’, la italiana inspirada en una historia real sobre un piloto italiano que compitió en el Campeonato de Europa de Rallyes, Carlo Capone, o la china ‘Speed Angels’, sin lugar a dudas, considerada como la sucesora moderna de aquel ‘Operación Trueno’ de Jackie Chan, nos demuestran que siempre es fácil que no sigamos la pista de títulos que al igual que los videojuegos, muchas veces no superan la barrera que forman las fronteras.

Curiosamente sí llegó a ser doblada al castellano la propuesta escandinava de ‘Borning’ seguramente una de las películas más descabelladas que podamos ver actualmente sobre coches, en la que incluso nos encontramos el amor de los norteños por los Muscle Car americanos, su peculiar sentido del humor y la aparición estelar en la primera de las dos películas de Fredric «Norwegian Hammer» Aasbø y su espectacular Toyota GT86, el cual nos regala unas impresionantes derrapadas en los espectaculares escenarios de la parte más septentrional de Noruega.

Las motos, también una buena alternativa:

Es cierto que en cuanto a motos son los muchos documentales que se han rodado acerca de las distintas categorías los que sobresalen destacadamente dentro del género, hasta el punto de que hemos podido ver absolutas obra de arte como ‘Hitting the Apex’, ‘Racing Together’, la saga ‘Faster’, ‘Faster&Faster’ y Fastest, o las muchas propuestas personalistas que nos han narrado las historias de los pilotos, desde el ‘Why We Ride’ o el ‘Born2Ride’, a los documentales que han mostrado la otra cara de los Jorge Lorenzo, Dani Pedrosa, Andrea Dovizioso, Valentino Rossi o el propio Marc Márquez. En este orden de cosas, ‘Wayne’, sobre la historia de Wayne Gardner es uno de los trabajos más recientes y llamativos, en la línea de ‘McLaren’ ‘Senna’ o ‘Williams’ entre sus hómologos de cuatro ruedas.

Si bien aquí nos encontramos trabajos exquisitos, es cierto que dentro del Cine es más complejo encontrar una película sobre motos que se aleje de esa fama de “malotes” que siempre rodea a estos usuarios de las vías debido a grupos minoritarios y problemáticos. La pasada década, en pleno estallido de ‘The Fast & The Furious’, no se hizo raro que se tratara de sacar cierto beneficio de este repentino interés por este mundo de las carreras ilegales.

No fue de extrañar que ‘Biker Boyz’ y ‘Torque’ apenas salieran unos meses más tarde que la segunda película de la saga de Paul Walker y Vin Diesel, aunque con mucho menos impacto en la taquilla. Ahora, más de una década después, ‘Burn Out‘ llegaba desde Francia para mostrarnos esa cara cruda y oscura del cine galo a la hora de relatar ciertas historias: en este caso haciendo referencia a un talentoso piloto de competición que corre en las pruebas road y que se ve obligado a hacer algunos trabajos poco legales.