ESPACIOS
Cerrar CERRAR
Competición

5 MIN

Crónica del GP de Brasil 2019: ¿Y nos quieren quitar Interlagos?

Esa pregunta es la primera que se te viene a la cabeza tras disfrutar un Gran Premio de Brasil como el de este domingo. Vale que ningún trazado garantiza que todas y cada una de sus carreras sean divertidas y que las carreras una vez decidido el título son siempre un poco ‘raras’. Pero no puede ser casualidad que Interlagos depare habitualmente carreras emocionantes y/o locas como la que dio el triunfo a Max Verstappen acompañado en el podio por Pierre Gasly y Carlos Sainz: el podio más joven de la historia.

En cualquiera de los escenarios posibles esto iba a ser un carrerón. Una buena arrancada de Lewis Hamilton propició que el campeón del mundo arrebatara en la salida el segundo puesto a Sebastian Vettel por el exterior de la primera curva, mientras Max Verstappen lograba abrir hueco. Y desde muy pronto quedó claro que iba a ser una carrera a fondo, a dos paradas, un duelo entre ambos con puntos álgidos en los pasos por boxes. El primero de ellos pareció sonreír a Hamilton, pues el undercut le situó por delante y Verstappen se vio frenado por una reincorporación temeraria de Robert Kubica al carril de boxes.

Mas Verstappen se encontraba en estado de gracia este fin de semana y tardó poco en recuperar la cabeza de carrera, con un Hamilton incómodo tanto con sus neumáticos como con su mecánico, como bien hizo saber por radio. En la segunda parada fue la maestría de Red Bull, con un cambio de gomas en 1,9 segundos lo que asentó el liderato del neerlandés. Parecía todo ya estable, pero la rotura de motor de Valtteri Bottas, incapaz de adelantar en pista a un Charles Leclerc que remontó con facilidad durante su primer stint, derivó en un largo Safety Car para reordenar el pelotón.

Ahí Red Bull hizo una fuerte apuesta que resultó. Max Verstappen renunció a la cabeza de carrera con tal de montar neumáticos más apropiados para la resalida y Lewis Hamilton no le duró ni una curva. Es más, Red Bull se encontró con sus dos coches en podio gracias a una magnífica maniobra de Alexander Albon sobre Sebastian Vettel. Pero el alemán, con dificultades para encontrar el ritmo, quedó también a merced de su compañero Charles Leclerc y todo acabó de la peor manera posible para la Scuderia.

El accidente entre los dos pilotos de Ferrari y la cantidad de restos en pista forzaron una nueva aparición del Safety Car, que en Mercedes consideraron momento oportuno para que Lewis Hamilton imitara a Max Verstappen: paso por boxes y jugárselo todo a adelantar con goma fresca, aún a costa de ceder posición a Albon y Pierre Gasly, tercero con su Toro Rosso. El francés no opuso resistencia, pero Albon defendió con uñas y dientes el que debía ser su primer podio… y en el único momento en que abrió la puerta Hamilton se pasó de frenada y lo mandó en trompo. Con el alerón delantero colgando el británico trató de dar caza a Gasly, pero ni por esas evitó que el galo alcanzara el segundo puesto. Y una sanción postcarrera terminó relegando al campeón al séptimo puesto.

Con suspense tanto por la sanción a Hamilton como por una investigación por uso del DRS con bandera amarilla cayó el primer podio de Carlos Sainz Jr. Lo cierto es que aunque alcanzar el tercer puesto es siempre una satisfacción, la prestación del madrileño en nada hubiera cambiado de haber sido la decisión de los comisarios diferentes. Saliendo último supo tomarse las cosas con calma al inicio, ser agresivo cuando debía y aguantó cuando más vulnerable era por culpa de los coches de seguridad. La guinda a una temporada de madurez y liderazgo en McLaren que aún puede culminar con el sexto puesto en el Mundial. También justo premio para McLaren, que ha estado muy por encima de sus rivales directos pero veía cómo sistemáticamente «el resultado» se le escapaba pese a su regularidad.

Y es que cuando se habla de madurez hay que subrayar lo importante que resulta eso en una clase media tan reñida. Al incidente entre Kevin Magnussen y Daniel Ricciardo podemos referirnos sin ir más lejos. Como también se puede decir que parece haber pilotos más cómodos siendo cabeza de ratón que cola de león tal y como Pierre Gasly nos ha demostrado. Ahora bien, su podio no tiene por qué abrir debates en una Red Bull que bien pudo haber hecho hoy doblete. Mucho nos tememos que las reflexiones sobre pilotos en los próximos días estarán teñidas de rojo…

Foto | Red Bull Content Pool

Cargando...