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La semana de la verdad para el mercado de fichajes del Mundial de Rallyes

Semana clave para el futuro de los pilotos del Mundial de Rallyes. A la espera de saber si el anuncio de la alineación de Toyota GAZOO Racing para el Dakar 2020 viene acompañado también de alguna confirmación en lo referente al WRC, el panorama de fichajes tan solo ha traído hasta ahora el anuncio de la renovación de Dani Sordo con Hyundai Motorsport para la próxima campaña, el cual se unirá a los otros pilotos ya con contrato: Thierry Neuville y Sébastien Loeb.

Precisamente el equipo Hyundai es uno de los que más temas tiene todavía por resolver en los próximos meses antes del Rallye de Monte-Carlo. Andreas Mikkelsen, el cual ha decidido no renovar contrato con su agencia de representación, EVEN Management, estará en la última prueba del 2019, pero todo parece apuntar a que Andrea Adamo podría elegir entre el nórdico y Craig Breen, dos piezas de la estructura con las que no terminó demasiado contento en Gales y que seguramente ha llevado al italiano a volver a recurrir de un Dani Sordo que finalmente ha tenido un programa mucho más largo del que se esperaba.

Recordemos que en el Rallye de Alemania el jefe de Hyundai Motorsport apuntó que no se había sentado a negociar con Ott Tänak, sin embargo, el acuerdo con Toyota no llega y los rumores se disparan, incluso alimentados por la web oficial del campeonato. Por su parte, Tommi Mäkinen ya dejó entrever que Jari-Matti Latvala podría ser el elegido para dejar su hueco a la llegada de un Kalle Rovanperä que ya fue más rápido que Esapekka Lappi y Teemu Suninen hace tres años durante los test del Toyota Yaris WRC.

Perder a Tänak sería decir adiós a la brújula y el seguro de vida de la estructura, sin tener recambio en el mercado, por lo que es posible que finalmente se llegue a un acuerdo económico y de duración contractual que se acerque a las pretensiones del actual líder del Mundial. Por su parte, Kris Meeke parece estar llamado a renovar por una temporada más, mientras que Takamoto Katsuta apunta a un equipo satélite que dependerá del presupuesto disponible para pasar a ser de una o dos unidades.

Sobre el papel, la firma de los dos chevrones no se moverá demasiado en el mercado durante este invierno. Tanto Sébastien Ogier como Esapekka Lappi tienen contrato de cara a 2020 y por el momento la marca francesa no ha anunciado que vaya a cambiar su plan y alinear un tercer coche. Opciones no les faltan en la recamara, especialmente si miramos a la lista de Australia y vemos quién es el elegido en el caso de necesitar de una tercera pieza para ayudar a Sébastien y Julien Ingrassia en la búsqueda de su séptimo título consecutivo.

Eric Camilli ha realizado numerosas pruebas de test desde el verano, e incluso estará este fin de semana con un Citroën C3 R5 de Saintéloc en la cita catalana. El francés ha tomado el lugar dejado vacante por Stéphane Lefebvre, pero ahora la situación a seguir será saber lo que ocurre con los prometedores compatriotas que están dando ya sus pasos en categorías inferiores. Sin tener una hoja de ruta definida, los Adrien Fourmaux, Pierre-Louis Loubet y Jean-Baptiste Franceschi, pueden tenerlo más complicado que sus predecesores de la FFSA a pesar de que el propio Loubet se ha mostrado ya muy competitivo en WRC2.

En M-Sport el principal objetivo es el de mantener a Elfyn Evans y Teemu Suninen de no conseguir cerrar la contratación de Ott Tänak. El estonio es la clave del mercado, algo que a estas alturas ya ni es necesario repetir. Sin embargo, la posición de M-Sport puede ser la de pescar en los descartes del resto de estructuras. Si Andreas Mikkelsen, Craig Breen o Jari-Matti Latvala no han cerrado su futuro, el equipo británico se puede beneficiar no solo de los pilotos con los que no cuentan el resto de estructuras, sino también con los ya relacionados con los de Cumrbia: Hayden Paddon, Gus Greensmith o un Pontus Tidemand obligado a dar el salto cualitativo que se le pide.

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