No están siendo los mejores momentos para el Chelsea. Después de perder ayer el derbi frente al Arsenal de forma contundente, tras caer eliminados de la Champions League, sin esperanzas por la Premier y con la FA Cup como único objetivo para lo que resta de temporada, el club londinense afronta la marejada que ha supuesto para la institución las sanciones aplicadas sobre el que hasta ahora era su propietario, Roman Abramovich. El bloqueo de todas las actividades económicas aplicadas sobre el empresario ruso ha paralizado incluso la venta que había anunciado el dirigente hace unas semanas y han convertido en un todo un caos la planificación financiera y deportiva del equipo para la próxima campaña.
Tanto es así, que incluso algunas renovaciones capitales como las de su capitán, Cesar Azpilicueta o el futuro de su delantero estrella, Lukaku, han pasado a estar en un limbo cuanto menos peligroso para un club del presupuesto e importancia como son los blues. Llegados a este punto, ha surgido hoy mismo una información proveniente de Sky donde se está vinculando a los deportistas Serena Williams y Lewis Hamilton con un consorcio que estaría pujando públicamente por adquirir el Chelsea.
Nunca ha ocultado el heptacampeón del Mundo de Fórmula 1 su afinidad por el equipo de Stamford Bridge, por lo que parece una posibilidad más que plausible que Lewis haya decidido acompañar a esta iniciativa encabezada por el expresidente del Liverpool Football Club y de British Airways, Martin Broughton, siendo junto a la tenista estadounidense, dos de los inversores para que pueda llegar adelante dicha opción, apuntando a que cada uno de ellos aportaría en torno a 10 millones de libras esterlinas al fondo.
Las informaciones de Sky apuntan a que Hamilton aprovecharía para no ser un “propietario invisible”, sino que adoptaría un papel activo dentro de la dirección del Chelsea en el caso de que se concrete, con iniciativas para promover la diversidad, la inclusión y la igualdad, algo que ya ha realizado con Mercedes en la Fórmula 1 y también desde un lado eco-friendly con su presencia en el Extreme E a través de su propia estructura, el X44 en el que compiten Sébastien Loeb y Cristina Gutiérrez.
Por el momento, como destacamos, no se trata de una apuesta 100% segura, ya que la Premier suele ser un gran atractivo para grupos de inversión especialmente provenientes de Estados Unidos, algo que ya se encuentra representado por ejemplo en el Manchester United, así como la presencia de dueños de Oriente, tal y como refleja el actual organigrama del Manchester City o del Newcastle. Todos los interesados deberían satisfacer la obligación de presentar un aval de mil millones de inversión para garantizar el futuro del club, el de sus infraestructuras, el de la academia de fútbol y del equipo femenino.
La adquisición del Chelsea FC deberá ser aprobada por el gobierno de Reino Unido, responsable precisamente de las sanciones aplicadas a Roman y ese bloqueo económico que ha puesto en jaque al equipo. Curiosamente no sería el primer nexo de unión entre la Fórmula 1 y el equipo de Londres, ya que en 2012 fue patrocinador del equipo Sauber, estampando su escudo en el capó motor del C31 en el que competían Kamui Kobayashi y Checo Pérez.
