Algo muy importante se avecina a la gama Toyota para dar respuesta a todos los fans del todoterreno. El Land Cruiser es cada vez mejor 4×4, pero también un coche más caro, lo que hace que el mercado demande nuevas opciones de compra que recuperen su espíritu original. Y es por ello por lo que el fabricante japonés trabaja en un coche muy interesante que no será otro SUV más, sino que buscará convertirse en el Land Cruiser mini con el que tantas veces hemos soñado los amantes del off-road.
Un Toyota Land Cruiser FJ que sí podríamos disfrutar en Europa
Hace ya algunos años que Toyota nos ilusionó con el lanzamiento del Compact Cruiser EV, un prototipo de todoterreno eléctrico que aspiraba a ser el hermano pequeño y eléctrico del nuevo Land Cruiser. El paso del tiempo ha llevado a este proyecto a ser revisado de forma profunda, tanto como para haber cambiado su plataforma de desarollo y hasta descartar por completo su condición de eléctrico.
Pero lo que no se ha descartado en Toyota es la idea de fabricar un todoterreno asequible que recupere la esencia del Land Cruiser de antaño, especialmente en cuanto al precio, pues los casi 80.000 euros que cuesta el nuevo Land Cruiser 250 hacen que sea ya un producto lejos del común de los mortales que buscan un vehículo verdaderamente capaz fuera de asfalto.
Si bien se ha especulado con el nombre de Land Hopper meses atrás, parece que este nuevo 4×4 podría acabar siendo bautizado como Land Cruiser FJ, homenajeando así a tan mítica denominación dentro de la historia de la marca. Con la intención de crear un coche bastante más compacto en cuanto a dimensiones, alrededor de los 4,4 metros de largo, y empleando el nuevo chasis ideado para la Toyota IMV O que se comercializará en Asia, Toyota estaría trabajando en un producto global capaz de adaptarse a mercados como Europa o Estados Unidos.
Para conseguirlo, una de las claves que traería consigo el Toyota Land Cruiser FJ es el uso de motores híbridos e incluso híbridos enchufables. Esta nueva plataforma desarrollada para la IMV 0 permite diferentes grados de electrificación, contando además con una estructura muy polivalente y suficientemente capaz como para instalar unas baterías con las que disfrutar de suficiente autonomía eléctrica para conseguir distintivos como la etiqueta CERO emisiones en España.
El desempeño off-road de este Land Cruiser FJ no será tan elevado como el de su hermano mayor, pero que no cunda el pánico, porque sí que ofrecerá unas capacidades notablemente superiores a los SUV de su tamaño, consiguiendo así diferenciarse claramente de ellos y dirigiéndose a un público que busque algo más que un todocamino.
A ello se sumará una estética ligada a la del Land Cruiser 250 y al prototipo Compact Cruiser, lo que redundaría en una imagen muy diferente a la empleada por la gama SUV de Toyota, brindado una estética más robusta, con mejores protecciones, pero sobre todo cargada de nostalgia gracias a los numerosos guiños a los Land Cruiser de la serie 70.
Toyota Land Cruiser 
