El Toyota Supra es uno de los deportivos más esperados de posiblemente la década. No sabemos si se llamará Supra, pero desde Toyota dan por hecho que es su claro sucesor, aunque lleve otro nombre. El nombre no es lo importante en este artículo, lo que es importante es que debe llenar los zapatos de su predecesor, elevado al nivel de mito del universo del automóvil. Autocar ha tenido acceso a información sobre el esperado deportivo japonés – desarrollado junto a una versión BMW – en la que han descubierto que podría no venderse con una caja de cambios manual. ¿Debemos empezar a preocuparnos?
Todos los rumores apuntan a que el Toyota Supra tendrá un sistema de tracción integral, asociado a un tren de propulsión híbrido, en cuyo desarrollo ha tenido mucho que decir la experiencia de Toyota con el TS030 Hybrid con el que han corrido en el WEC. Es del TS030 Hybrid del que el futuro Supra habría heredado los supercondensadores, que almacenarán energía para los motores eléctricos del deportivo. El tren delantero empleará motores eléctricos, mientras que el trasero sería movido por un motor de combustión interna de características desconocidas y origen BMW. Sabiendo esto, el cambio manual puede darse por descartado.
Esta enorme complejdidad técnica – al menos tres motores, baterías y supercondensadores – es imposible de gobernar sin un cambio automático completamente interconectado con todos los motores y la ECU del coche. A efectos prácticos, sería imposible incluir un cambio manual en esta ecuación, y todos los prototipos espiados usan de forma invariable, cambios automáticos. Dicho esto, los cambios manuales son una especie en clara desaparición en el mundo de las altas prestaciones. Fijaos en lanzamientos del grupo Toyota, como el Lexus RC F: no estuvo ni estará disponible más que con un cambio automático de 8 relaciones.
Coches como el BMW M4 aún ofrecen cambios manuales, aunque muy pocos clientes optan por esta opción. Prefieren la eficacia y rapidez de un buen automático, razones por las que también Toyota y BMW habrían optado por este tipo de caja. Aunque ambos coches tendrán una arquitectura muy parecida, Toyota debería poder modificar las relaciones de cambio, así como la puesta a punto general del deportivo. El Toyota Supra se convertirá en el buque insignia de la marca japonesa, y por el momento, no tendrá una alternativa en Lexus, que ya posee su propia gama de deportivos de alto rendimiento.
Al contrario que su versión BMW – llamada Z4 o Z5 – el Toyota Supra sólo se ofrecerá en carrocería coupé y debería llegar al mercado bien entrado el año 2018, apenas unos meses después que el deportivo bávaro.
Toyota GR Supra 
