Los niños escandinavos no suelen nacer como todos los demás con un pan bajo el brazo, ellos lo hacen con un Volvo o algún otro “barco” con el que pasan las tardes conduciendo sobre los lagos helados (por algo tienen menos deberes que los españoles). No es de extrañar que cuando llega el momento de ponerse al volante de un coche de rallyes ellos ya han vivido prácticamente cualquier situación que te puedas encontrar sentado en un coche. Uno de esos nórdicos superdotados es Kalle Rovanperä.
Hijo del ex-piloto oficial de Peugeot Harri Rovanperä, Kalle lleva prácticamente toda su vida sentado en un backet. Incluso el equipo se ha encargado durante las últimas temporadas de ir mostrándonos cada uno de los pasos de este chaval de 14 años. Hace 3 años lo vimos por primera vez subido a un Citroën C2 R2. Desde entonces lo hemos visto sobre múltiples monturas e incluso hace unas semanas probó el Seat Ibiza SC Trophy para ir tomando tacto con el asfalto, superficie en la que tradicionalmente a los finlandeses siempre les ha costado un poco más.
Lo cierto es que tres años después tenemos a Kalle montado sobre un Skoda Fabia S2000 y lo cierto es que se le siguen viendo maneras al joven finés. A World Champion is coming y al contrario que otros hijos de pilotos de rallyes, como Carlos Sainz, éste está decidido a dirigir su trayectoria a la categoría en la que su progenitor desarrolló gran parte de su carrera deportiva. A pesar de que en los rallyes el tema de la edad suele ser un problema (en los enlaces sin carnet de conducir no puedes llevar el coche y tiene que encargarse el copiloto) ya ha comenzado a hacer alguna salida a Letonia, donde ha sido capaz de ganar su categoría con facilidad al volante del Citroën C2 R2Max con el que lo descubrimos.
