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Brad Keselowski es el primer repetidor en Xfinity después de una carrera accidentada

En Charlotte se encuentra el corazón mecánico de NASCAR. La mayoría de equipos tienen su sede cerca de la ciudad grande de Carolina del Norte y el Charlotte Motor Speedway es una especie de circuito de casa dónde todos los pilotos quieren ganar especialmente. La Xfinity Series regresó tras tres semanas de pausa y lo hizo con una ronda inolvidable, llena de variedad, accidentes y emoción en varios lugares de la parrilla en la que el mejor fue Brad Keselowski. El de Penske y Kyle Busch se intercambiaron el dominio pero fue Keselowski el más pillo en el momento importante, rompiendo así la racha de 13 victorias consecutivas de pilotos distintos en la categoría.

Keselowski, Busch y Chase Elliott tomaron los primeros puestos en la salida junto a dos habituales de Xfinity como Tyler Reddick y Cole Custer. Brandon Jones y Christopher Bell alcanzaron a sus compañeros de campeonato y pelearon durante buena parte del primer segmento, mientras Busch y Keselowski iban a por la primera posición. Brandon Hightower trompeó en la curva 3 a mitad de segmento pero ningún piloto de cabeza se arriesgó a pasar por el pit lane y Busch ganó el primer segmento al adelantar en la resalida a un relegado Keselowski que acabó quinto. Jones, Elliott y Bell se colaron delante del de Penske.

La agresividad de los jóvenes pilotos aumentó con los toques ligeros de Bell y Daniel Hemric, aprovechados por Jamie McMurray y Ty Dillon. Keselowski cerraba el top 10 y empezó a ascender después de una mala parada en boxes que le echaba aún más atrás de lo que estaba. Garrett Smithley perdió el control de su Chevrolet en la curva 3 y generó una tardía caution que llevó a algunos pilotos al pit lane pero apenas varió la zona alta de la parrilla. Una colisión de Tommy Joe Martins no vio bandera amarilla alguna y Busch no dejó que nadie le tosiese y venció con autoridad el segundo segmento. Le siguieron Custer, Jones, McMurray y Ty Dillon.

Keselowski puso neumáticos nuevos en la caution previa, Reddick fue sancionado por tener más mecánicos de los autorizados en su parada y Sadler levantó el pie por culpa de un inminente pinchazo. Los dos primeros siguieron en pista al comienzo de la parte decisiva y aguantaron durante unas vueltas a Custer, Busch y Justin Allgaier, hasta que Custer se puso líder en la vuelta 103. Elliott no tuvo opciones de seguir en la pelea al abandonar con la transmisión rota y poco después Vinnie Miller trompeó en la salida de la curva 2. Custer y Allgaier dejaron atrás a Keselowski y el de Stewart-Haas intentó escaparse de su rival, que aguantaba a Keselowski y a Busch.

Ryan Reed tocó el muro de la curva 2 y el sobrecalentamiento producido por el golpe le hizo lanzar su ardiente botella de agua a la pista; ninguno de esos incidentes fueron suficientes para sacar la caution. Allgaier también rozó un muro y NASCAR decidió introducir la caution por unas gotas de lluvia que se disiparon ante la inmediata reaparición del sol. Durante la bandera amarilla, Alex Labbé se bajó de su Chevrolet con un bajón físico considerable, fruto de la rotura del aire acondicionado y el consiguiente exceso de calor dentro del pesado coche. El canadiense fue trasladado a un hospital del cual ya ha salido y no tendrá problemas para volver a competir este fin de semana en Pocono.

Reddick se pasó de velocidad en el pit lane y los mecánicos de Keselowski saltaron antes de tiempo, alejando a ambos pilotos de las posiciones delanteras de nuevo. Recibieron una ayuda en forma de accidente de Josh Williams, sustituto de Labbé en el #36, que ayudó a varios pilotos a entrar al pit lane y montar su último juego de gomas nuevas. Doce pilotos prefirieron seguir su camino, entre ellos los destacados Busch, Custer, Bell y Allgaier, entre los que se coló un mejorado McMurray que resalió bien pero fue rebasado en poco tiempo. Hemric, Jones y Keselowski alcanzaron el top 10 rápidamente, no así el veloz Reddick de misma estrategia que trompeó en la curva 2 y forzó otra interrupción.

Busch, Custer, Sadler, Bell, Allgaier y el resto de los que faltaban por detenerse en boxes lo hicieron en la caution de Reddick, resaliendo con los zapatos de goma y la gasolina necesaria para llegar al final. Busch se precipitó en la resalida y perdió el control de su Toyota al pisar hierba, chocando contra Chase Briscoe antes del accidente grande del día: Austin Cindric envió a Dylan Lupton al muro de la recta trasera, chocando un Lupton fuera de control con Ty Majeski en un malentendido entre Fords. Durante esa bandera amarilla volvió la lluvia, que interrumpió la carrera durante una hora y dio la resalida a falta de 24 vueltas.

Ryan Truex presionó al líder Keselowski con neumáticos frescos antes del accidente causado por Hemric que hizo chocar a Allgaier y McMurray. La aparición de un pequeño trozó de metal forzó la caution en la penúltima vuelta y el consiguiente Overtime, en el que apenas variaron las posiciones de cabeza. Dos trompos separados de Reddick y Majeski hicieron finalizar la carrera bajo bandera amarilla, imponiéndose un controlador Keselowski a Custer, Bell, Ty Dillon y Sadler. Truex obtuvo un buen sexto puesto, seguido de los incidentados Hemric y Busch, Tifft con el morro chafado y Kaz Grala con coche nuevo. Jones se perdió al final y acabó 15º, detrás del estratega Ryan Sieg y del recuperado Smithley tras trompo.

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