Hace mucho tiempo que el mundo del 4×4 está dividido entre los que prefieren el bloqueo total de diferenciales y los que apoyan el control de tracción, gracias a los grandes avances que está aportando la electrónica. Por ello en nuestro último vídeo hemos decidido llevar al límite a ambas soluciones, usando el mismo todoterreno para las pruebas y obteniendo por fin una respuesta a este dilema histórico.
¿Qué sistema es mejor para hacer 4×4?
De manos de un Suzuki Jimny modificado para poder usar a demanda un bloqueo total de la transmisión o el control de tracción, nos hemos ido hasta nuestro circuito de pruebas habitual, Raid Aventura 4×4 en Ocaña (Toledo), para determinar allí las capacidades de cada sistema empleando el mismo coche, en idénticas circunstancias y enfrentándolos a las mismas pruebas.
Y el resultado lo tenéis debajo de estas líneas, pues a lo largo de este vídeo vais a poder comprobar por vosotros mismos cómo funciona cada sistema, sus ventajas e inconvenientes, pero sobre todo vais a poder descubrir qué herramienta nos permite llegar más lejos a la hora de abordar obstáculos vedaderamente extremos.
El bloqueo total de diferenciales es el santo grial del 4×4, y es que a través de un bloqueo de todos los diferenciales instalados en el sistema de transmisión, nos aseguramos el que cada una de las cuatro ruedas gire igual que las demás. No importa la diferencia de agarre que exista entre ejes o ruedas, pues con el bloqueo total el avance está garantizado. En contra de este sistema está su elevada complejidad y coste, pues requiere de una elevada robustez para poder soportar los esfuerzos que se generan durante su uso.
En el caso de nuestra unidad de pruebas, este bloqueo total es posible gracias a una preparación ARB realizada a posteriori sobre los ejes delantero y trasero, lo que nos ha permitido precisamente comparar este sistema con la electrónica original que trae de serie el modelo.
El control de tracción es una alternativa que persigue el mismo objetivo que el bloqueo total de diferenciales, pero trabajando de forma reactiva y haciendo uso del sistema de frenos de una forma selectiva. Esto quiere decir que, cuando detecta que una de las ruedas no encuentra agarre, se activa el freno de esa rueda para evitar que toda la potencia del motor se fugue por ahí. Eso sí, el abuso al que se somete a los frenos puede acabar suponiendo un problema en conducción off-road extrema.
Su principal virtud está por lo tanto en que hablamos de un sistema realmente eficaz, pero mucho más sencillo y económico, encontrando en el Jimny actual uno de sus mejores ejemplos gracias a una respuesta muy rápida y contundente.
¿Y tú de qué equipo eres?
Suzuki Jimny PRO 
