El Citroën C5 Aircross ha nacido para llevar a Citroën hasta el segmento de los SUV compacto con un modelo muy competitivo, capaz de hacerle frente a las mejores alternativas del segmento, ¿sus argumentos? Lo suficientemente sólidos para que el Citroën C5 Aircross se convierte en tu próximo coche. Estas son las principales ventajas y los defectos de este modelo, del Citroën C5 Aircross.
¿La principal virtud del Citroën C5 Aircross? Su comodidad
El Citroën C5 Aircross llega desarrollado sobre la plataforma EMP2 de PSA, una plataforma que nos encontramos en el Peugeot 3008 o en el Opel Grandland X y que desde la marca han afinado apostando por el confort con una suspensión específica a la que han bautizado como amortiguadores progresivos hidráulicos, añadiendo un par de resortes adicionales, en compresión y extensión, para hacer más suaves las reacciones ante baches, resaltos y otras sorpresas que nos encontremos en el asfalto.
Estas suspensiones junto al aislamiento del coche y sus asientos hacen del Citroën C5 Aircross una de las alternativas más cómodas de su segmento, convirtiendo al confort de marcha en su gran atributo frente al resto de opciones del segmento, sin flaquear especialmente en otros puntos.
Las plazas traseras del Citroën C5 Aircross son modulares
Y es que estas confortables suspensiones no adolecen luego de un mal paso por curva aunque evidentemente el C5 Aircross queda lejos de la firmeza que ofrece el SEAT Ateca, referencia en este aspecto en el segmento, en el paso por curva, poniendo a nuestra disposición una dirección que si bien es blanda tampoco peca en exceso de ofrecer un mal peso o ser poco comunicativa, ahondando de nuevo en la idea de coche confortable.
En su habitáculo tenemos una buena dotación de tecnología, equipamiento disponible y habitabilidad, destacando en este aspecto la modularidad de las plazas traseras. Su maletero, de 580 litros, también nos ofrece una buena capacidad de carga.
¿Pegas? En el interior del Citroën C5 Aircross abunda el plástico duro
¿Un punto negativo? En su interior el plástico duro es abundante pero Citroën lo suple con un diseño del salpicadero agradable y que camufla muy bien el uso de estos materiales y sobre todo con buenos ajustes.
A todo esto le podemos sumar un diseño simpático y con personalidad, la posibilidad de equipar los motores de 180 CV que ofrecen un buen rendimiento, el diésel de 130 CV que cuenta con un buen nivel de eficiencia o la alternativa híbrida enchufable, para aquellos que están dispuestos a gastas un poco más para poder desplazarse en modo totalmente eléctrico, con la etiqueta de 0 emisiones de la DGT y el resultado es el de un SUV compacto muy competitivo, que destaca sobre todo por ser confortable.
¿Alternativas al Citroën C5 Aircross?
Si estás pensando en comprar un Citroën C5 Aircross no te pierdas nuestra guía de compra de SUV compactos, con todas las alternativas de un segmento donde destacan como referencias un Peugeot 3008 que ahonda en una perspectiva más premium, diferenciada y tecnológica y un SEAT Ateca que brilla por equilibrado, por su gran relación precio / producto y su gran dinámica.
Citroën C5 Aircross 
