Por norma general, entendemos que la DGT centra sus esfuerzos en nuestra movilidad como conductores, bien sea a bordo de un turismo, una motocicleta o incluso sobre una bici, o en lo relativo a las últimas campañas enfocadas al transporte escolar y de mercancías. Sin embargo, también persigue que como peatones podamos desplazarnos con total seguridad, tanto para nosotros mismos, como para los demás usuarios de la vía. Y así lo demuestra con su última publicación en Twitter, donde con una serie de preguntas retóricas invita a valorarnos como tales y a mejorar nuestra conducta cuando vayamos a pie: ¿Crees qué eres buen peatón? ¿Caminas distraído con el móvil o auriculares? ¿Usas pasos de peatones?
Los desplazamientos a pie son una de las alternativas a la #movilidad motorizada, pero ¿crees que eres buen peatón? ¿Caminas distraído con #móvil o auriculares? ¿Usas pasos #peatones?
Estos son los principales consejos (y obligaciones) para cuando vayamos a pie
En primer lugar, recordar que no somos peatones siempre que vamos caminando en la vía pública, sino que según la definición de la propia DGT también lo somos cuando empujamos un vehículo de pequeñas dimensiones sin motor, como por ejemplo una bicicleta, o hacemos uso de un vehículo para personas de movilidad reducida.
Así pues, en todos estos casos es obligatorio cumplir una serie de normas, todas ellas de sentido común: circular sólo por los lugares habilitados, intentar caminar por el centro de la acera, y si no la hubiere, hacerlo lo más pegado posible a la pared, no llevar animales sueltos e invadir la calzada sólo para cruzarla. Asimismo, la DGT recalca la importancia de no usar auriculares o ir pendiente del teléfono móvil para evitar distracciones.
Respecto a este último punto, cómo cruzar la calle, lo ideal es hacerlo por un paso de cebra o por cualquier otro regulado para tal efecto. En caso de que no existan, que es lo más normal, sobre todo en pequeñas poblaciones, se debe elegir una zona con visibilidad, y tras cerciorarse que no se acerca ningún vehículo, cruzar con decisión. Igualmente, y según el artículo 65 del Reglamento General de Circulación, cuando un conductor vaya a girar para incorporarse a otra vía y se encuentre con peatones cruzándola, son estos últimos quienes tienen prioridad de paso.
En caso de caminar por carretera o vías interurbanas, se hará por el arcén izquierdo o lo más próximo a ese borde, de frente al tráfico rodado, y siempre que no exista prohibición expresa que impida circular a peatones por la misma. Además, es recomendable usar prendas reflectantes, incluso de día, para aumentar la visibilidad.
No somos tan buenos peatones como creemos
Sin embargo, en la gran mayoría de los casos incumplimos todas las normas y recomendaciones anteriores, y es que no somos tan buenos peatones como nos creemos, pero al menos somos conscientes de ello. En una encuesta realizada por la DGT, en la que se nos pedía que nos valorásemos nuestras conductas del 1 al 3 en diferentes roles, siendo el 3 el máximo cumplimiento de las normas, los conductores se calificaban con un 2,78, los ciclistas con un 2,51 y los peatones con un 2,38. En cuanto al cumplimiento de los otros, esas calificaciones bajaban hasta los 1,99, 1,81 y 1,70, respectivamente.
Así pues, entre las más conductas más típicas nos encontramos caminar sin hacer uso de prendas reflectantes (86,6 %), cruzar la calle donde no hay paso de cebra (55,2 %) y bajarse de la acera para adelantar a otros peatones (40,7 %). Por contra, otros comportamiento igualmente peligrosos e indebidos, como sortear los coches para cruzar la calle, cruzar sin hacer uso de un paso habilitado cercano o caminar sobre el carril bici, son las menos habituales.
