Todavía no hay que decir adiós del todo al Fiat 500 de combustible que hemos conocido durante más de tres lustros. Si bien ya terminó la producción del modelo que salió allá por 2017 en Polonia, Del 500e eléctrico podría surgir una variante de gasolina microhibridada que podría suponer un cambio radical en el panorama en varios sentidos. Se trata de algo completamente fuera de lo común ya que hablaríamos de un coche eléctrico que se pasa a gasolina (Automotive News Europe).
El Fiat 500 microhibridado supondría una gran inyección para Mirafiori
El archiconocido Fiat 500 y el Fiat 500e no son sólo dos coches diferentes sino dos que se arman en sitios diferentes. El 500 normal se ha fabricado en Polonia mientras que el 500e se fabrica en la planta de Fiat en Mirafiori, de donde han salido tantísimos modelos de la marca a lo largo de su historia. El 500e no sólo es eléctrico y se concibió originalmente en una plataforma exclusiva para eléctricos, sino que también crece en tamaño con respecto a su antecesor.
Los suministradores de Stellantis ya tuvieron un indicio de esto el pasado mes de marzo cuando se les pidió de parte de Stellantis Italia presupuestos para un servicio con el supuesto fin de aumentar la producción del 500 hasta 200.000 unidades anuales. En 2023 se construyeron 77.260 unidades del Fiat 500e en Mirafiori, menos de la mitad de lo que estos reportes de suministradores muestran. Este nuevo objetivo implicaría que de esas 200.000 unidades anuales 125.000 serían del modelo de combustión (en teoría microhibridado) y el resto del eléctrico.
¿Por qué es tan crucial? En primer lugar, es una gran noticia porque supone una inyección de trabajo y actividad industrial a la planta de Mirafiori, casi triplicando el objetivo de unidades a fabricar con respecto al año pasado. Esta planta de Mirafiori viene de haber sufrido un recorte de turnos a mediados de febrero y aplicación de ERTE en los tres últimos meses debido a la falta de ventas del 500e. En 2023, se vendieron más de 62.000 500e mientras que del 500 de gasolina se vendieron más de 104.000 unidades según Dataforce.
La segunda es el hecho de que un 500 microhibridado supondría un posible éxito de ventas en el país natal de Fiat, donde cosecha la gran mayoría de sus ventas tal como le ocurre a Alfa Romeo. Y más concretamente al 500, un modelo muy favorecido en su tierra junto con el Panda, líder de ventas en 2023 frente al Dacia Sandero, Lancia Ypsilon, Toyota Yaris Cross y el 500.
Llegaría a finales de 2025 o principios de 2026
En teoría, habría que esperar hasta finales de 2025 o principios de 2026 para ver el comienzo de la producción de este 500 microhibridado. El motor de combustión que utilizaría en teoría no es otro que el mismo 1.0 FireFly de 70 CV que utilizan tanto el 500 conocido hasta ahora como el Panda. La cuestión sería la arquitectura que utilizaría…y, por supuesto, el gran arma del 500, además del factor ‘retro’: el precio. El modelo saliente se situaba en unos 17.700 euros, siendo de los modelos nuevos más baratos del mercado.
