Amantes del downsizng y la electrificación, el último motor que acaba de crear Ford puede que no os guste demasiado. Bajo el imponente nombre de Megazilla, Ford Performance acaba de presentar una nueva evolución del 7.3 V8 atmosférico apodado Godzilla. Esta mecánica de 8 cilindros y espíritu yankee a más no poder, es el santo grial de los fans de Ford para acometer preparaciones de todo tipo y condición, pues estamos ante el monstruoso motor que dará a vida a coches de dragster, enormes pick-up y los Muscle Car más salvajes que hayamos visto.
El mercado aftermarket de Estados Unidos es un verdadero paraíso a la hora de buscar componentes para mejorar cualquier coche, motivo por el cual los fabricantes de coches ofrecen catálogos repletos de piezas, en donde también es posible encontrar motores completos como los denominados «crate engine». Este tipo de propulsores no siempre se instalan en coches de producción en serie como es el caso del Megazilla que nos ocupa hoy, buscando así ser el perfecto reemplazo de los motores «stock».
Fue en 2019 cuando Ford nos presentó el V8 Godzilla de 450 CV en su catálogo Performance Parts, un motor que además fue diseñado para poder ser instalado en coches como el Mustang o la F-150. Pues bien, ahora Ford Performance ha decidido ir un paso más allá, evolucionando está mecánica para crear el nuevo V8 Megazilla (código M-6007-MZ73). Hablamos de un verdadero monstruo, pues este motor de 8 cilindros en V, con 7,3 litros de cubicaje y aspiración atmosférica, es capaz de desarrollar 615 CV y 867 Nm… y eso solo en su configuración más básica.
Por lo tanto estas cifras son solo el primer peldaño, pues Ford Performance ha planteado el Megazilla para servir de base a todo tipo de preparaciones, algo que sería tan sencillo como acoplarle un compreso volumétrico de esos que tanto se estilan por aquellos lares. De este modo, el nuevo V8 Megazilla puede soportar fácilmente potencias muy por encima de los 1.000 CV, contando además con componentes reforzados como pistones, ciguëñal, bloque motor, etc. para soportar los esfuerzos que este incremento de potencia supondría.
Así que si los 710 CV de tu Ford F-150 Raptor R o los 771 CV de tu Shelby GT500 se te antojan escasos, ya estás tardando en hacerte con el nuevo V8 Megazilla y comenzar a sacarle potencia.
Fuente: Motor Authority
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