Muchas veces parece que el mundo se acaba en las marcas premium, pero no es así. Y es que por 30.000 euros menos podemos tener un SUV con tamaño de GLC, autonomía de diésel, etiqueta de eléctrico y equipado hasta arriba.
Es el SUV que quiere acabar con la marquitis
- Es uno de los PHEV más interesantes del mercado.
- Ofrece una potencia conjunta de 218 CV.
- Declara una autonomía en modo eléctrico de 80 km.
Sabemos que uno de los mayores problemas de las firmas chinas es la incógnita que presentan todas en cuanto al envejecimiento de sus productos. ¿Qué tal estarán dentro de 10 o 15 años? ¿Seguirán funcionando bien? ¿Habrá recambios siempre? Preguntas lógicas y que se apaciguan, en cierta manera, con productos con una buena relación calidad-precio como el BYD Seal U DM-i.
Curioso apellido que hace referencia a la versión PHEV del SUV de BYD. Hablamos de un coche que combina un motor gasolina de cuatro cilindros y 1.5 litros atmosférico con uno eléctrico para desarrollar de manera conjunta 218 CV y 300 Nm de par.
No, no son cifras de escándalo, pero sí suficientes para mover con soltura al Seal U. Aunque más importante es lo que ofrece como PHEV. Y es que el SUV chino cuenta con una batería de 18,3 kWh de capacidad que, bajo el ciclo WLTP, declara una autonomía en modo eléctrico de 80 km. Cifra más baja que la de sus rivales europeos, pero existen versiones del BYD Seal U DM-i que la elevan hasta los 125 km.
| Especificaciones | |
|---|---|
| Motor | Boost |
| Cilindrada | 1.498 cm³ |
| Potencia combinada | 218 CV |
| Par combinado | 300 Nm |
| 0 a 100 | 8,9 s |
| Velocidad máxima | 170 km/h |
| Electrificación | PHEV |
| Batería | 18,3 kWh |
| Autonomía EV | 80 km |
| Etiqueta | CERO |
¿Cómo va el BYD Seal U DM-i?
- Es un coche sumamente cómodo.
- Invita a realizar una conducción sosegada y viajes largos.
- También es cierto que se comporta de manera algo torpe.
Ahora bien, ¿cómo se comporta el SUV de BYD? Hablamos de un coche que apuesta, sin lugar a dudas, por el confort de marcha. Y es que su suspensión recoge perfectamente las imperfecciones del asfalto, ofreciendo así una sensación de alfombra voladora. A ello también ayuda su aislamiento acústico que, gracias a unos cristales dobles, se mitigan los ruidos del exterior.
Sin embargo, esto también provoca que el Seal U DM-i sea un coche algo torpe en su paso por curva y no especialmente ágil. No es que no se mueva bien con 218 CV, que lo hace, pero se perciben oscilaciones de la carrocería en virajes cerrados. Debemos tener en cuenta también su dirección, que está muy filtrada y no ofrece nada de información de lo que sucede en el asfalto.
¿Qué condiciones plantea BYD?
Pero, ¿hay truco en el precio del Seal U DM-i? BYD pide 30.790 euros, cifra que tiene descuentos y MOVES III aplicados, estando este último sujeto a disponibilidad en el momento de la compra. Pero si no tenemos en cuenta ninguno de estos dos aspectos, el SUV chino cuesta 38.500 euros.
Una cifra que, de igual manera, sigue siendo muy competitiva. Y es que un Mercedes-Benz GLC PHEV parte desde los 68.071,20 euros, un BMW X3 PHEV desde los 66.800 euros y un Audi Q5 PHEV desde los 68.240 euros.
A ello tenemos que sumarle el acabado Boost, que ofrece de serie techo panorámico practicable, asientos ventilados y calefactados con regulación eléctrica y tapicería de cuero sintético, equipo de sonido Infinity, llantas de 19 pulgadas, instrumentación digital de 12,3″, pantalla rotatoria de 15,6″ compatible con Apple CarPlay/Android Auto, ADAS avanzados como alerta de tráfico cruzado trasero o detección de vehículos en punto muerto, apertura eléctrica del maletero, cargadores inductivos para teléfonos móviles o Head-Up Display entre otros.
Las alternativas del BYD Seal U DM-i
