El BYD Tang es uno de los coches más esperados porque se convierte en el SUV eléctrico de 7 plazas más barato del mercado por un amplio margen. En esta prueba a fondo vamos a desgranar todos los secretos de este SUV chino que, por relación calidad/precio se posiciona como un rival temible para toda su competencia.
Cuando digo que el BYD Tang es mucho más barato que su competencia no quiero decir que sea un coche barato, de hecho es un coche bastante caro. Para vehículos en stock y en el momento de escribir esta prueba, el BYD Tang se sitúa en poco más de 58.000 € financiando con la marca y 60.000 € sin financiar. Es mucho dinero, pero no hay nada parecido por menos de 85.000 €.
Diseño exterior del BYD Tang
Para entender el diseño del TANG, hemos de saber que el jefe de diseño de BYD es Wolfgang Egger, ex-responsable de diseño de SEAT, Alfa Romeo y Audi antes de llegar a BYD. A su vez, el jefe de diseño exterior viene de Ferrari y el de interiores viene de Mercedes Benz. Son todos europeos y eso se nota en el estilo del coche.
Tenemos un frontal afilando y moderno, de rasgos suaves entre los que destaca una enorme parrilla que en su parte central facilita la ventilación y en los bordes es un trampantojo para dotar al coche de mayor empaque. El truco funciona.
En el perfil, sus proporciones perfectas, su estilo fluido y limpio y unas enormes llantas de 22″ que ayudan a aligerar el peso visual del conjunto configuran una estética SUV de lo más atractivo.
La parte trasera dispone de luces led tridimensionales y, de nuevo en muy pocas líneas, se cierra una figura atractiva y potente a la vista. El nombre de la marca está escrito con todas las letras «BUILD YOUR DREAMS».
Para situar a este coche en sus segmento hemos de saber que mide 4,87 m de largo, 1,95 m de ancho y 1,73 de alto. Es un coche grande, pero entre los SUV eléctricos de 7 plazas resulta bastante compacto.
Interior del BYD Tang
Uno de los prejuicios que tienen que vencer todos los coches chinos de marcas desconocidas (de momento) es el tema de calidades. Pues bien, este coche tiene calidades premium, se mire por donde se mire, y en lo tocante a ajustes y materiales está al nivel de lo mejorcito que te puedas encontrar en Europa o Japón.
Únicamente podemos llegar a escuchar algún crujido si apretamos con fuerza la consola central, y esto es debido a la abundancia de plásticos rígidos en este punto. Lo peor es que se trata de al tan odiado «piano black» un plástico de acabado brillante que resulta espectacular a la vista pero muy fácil de manchar y rallar. Esa consola central tan frágil es el punto débil del interior.
Los asientos son magníficos: regulación eléctrica, longitud de banqueta variable, tapizado en cuero vegano, calefactados, refrigerados y muy bonitos, cómodos y envolventes. Una maravilla.
El diseño del salpicadero es fluido, de líneas suaves y agradables. Resulta atractivo por sus formas y por la combinación de colores y materiales.
El Tang dispone de un cargador inalámbrico a la altura del codo, así como diferentes tomas de recarga USB tipo A, lo cual sorprende porque prácticamente todos los coches traen ya USB-C, más pequeños y potentes.
La pantalla central es gigantesca, nada menos que de 15,6″, y cuenta con la peculiaridad de poder rotar 90ª dando lugar a una disposición vertical u horizontal, a gusto del consumidor. Lo que más destaca de la pantalla es al fluidez de su funcionamiento, es brutal la instantaneidad de respuesta. La resolución también es sobresaliente, incluyendo las cámaras 360 y la representación del entorno. La pantalla es excelente.
Su gran carencia en el apartado de infoentretenimiento es la ausencia de Apple Car Play y Android Auto, algo imperdonable a día de hoy. BYD nos dice que ambas formas de conectividad estarán disponibles en breve a través de una actualización y, extraoficialmente, también nos confirman que algunos concesionarios lo están instalando directamente a sus clientes. No es una mala solución, pero parece mentira que no venga de serie.
El cuadro de mandos del BYD Tang cuenta con unos gráficos excelentes en cuanto a definición y claridad, si bien es verdad que adolecen de pocas posibilidades de personalización. Por ejemplo, el mapa de guiado no se puede representar en el cuadro de mandos, lo que obliga a desviar la vista a la pantalla central.
Plazas traseras del BYD Tang
Las plazas traseras del Tang son francamente buenas, tanto en calidad de acabados y materiales (idénticas a las excelentes plazas delanteras) como en espacio para rodillas, hombros y cabeza. Es un coche muy amplio. Contamos también con aireadores y tomas USB, aunque de nuevo son USB-A en lugar de USB-C. Imagino que BYD no tardará en actualizar estos puntos de recarga.
La banqueta central es deslizante, lo cual nos permite ceder una parte del generoso espacio longitudinal a los pasajeros de las plazas 6 y 7 en la tercera fila, o bien al maletero si prescindimos de las últimas dos plazas. El acceso a esta fila es muy bueno, y el espacio es correcto para adultos de hasta 1,80 m de estatura aproximadamente sin mermar apenas el confort de la fila del medio, que sólo tiene que ceder unos pocos centímetros para que vayamos cómodos atrás de todo.
Puedo afirmar que contamos con 7 plazas reales y cómodas para 7 adultos, si bien las dos últimas tienen unas ventanillas mucho más pequeñas y pueden dar cierta sensación de ahogo.
Maletero del BYD Tang
El maletero del BYD Tang depende de las plazas que estemos utilizando para pasajeros.
La cifra crítica son los 235 litros disponibles con los 7 asientos en posición de viaje. Es un volumen pequeño, pero para ser un 7 plazas lo cierto es que no está mal del todo y nos permite llevar un buen número de mochilas o bolsas de mano apiladas, si bien no será el equipaje de 7 personas.
Si abatimos la última fila y nos quedamos con 5 plazas, el maletero es muy generoso. BYD declara 940 litros hasta el techo, pero esta cifra no es comparable a la de sus rivales europeos, que miden el maletero hasta la línea de ventanillas. Probablemente dispongamos de unos 600 litros hasta las ventanillas, y bastante más si deslizamos la banqueta hacia delante. Es un maletero más que amplio para el equipaje de 5 ocupantes.
Si abatimos también la fila central y convertimos el coche en biplaza, conseguimos una superficie continua y horizontal con 1.655 litros de volumen hasta el techo. El espacio es gigantesco y se convierte casi en una pequeña furgoneta.
Conducción del BYD Tang
La dinámica del BYD Tang es bastante previsible, ya que todos los coches eléctricos se parecen como gotas de agua. Como cabría esperar, es un coche silencioso y cómodo, con una potencia salvaje para arrancar desde parado y una capacidad de aceleración y recuperación desde velocidades lentas y medias brutal.
En curva, a pesar de ser un coche de 2.500 kg (que es una barbaridad) gira realmente bien gracias a que todos esos kilos están básicamente en el centro y en el fondo del coche. No llega a ser realmente divertido de conducir, porque no está diseñado para ir muy rápido, pero tiene un tacto muy agradable en toda circunstancia y se mete en las curvas tenazmente a pesar de la inercia, con un comportamiento perfectamente neutro. La tracción integral y los numerosos controles electrónicos ayudan mucho a que sea casi imposible hacerle perder la compostura.
| DATOS TÉCNICOS | BYD TANG |
|---|---|
| Potencia | 380 kW (517 CV) |
| Par Máximo | 680 Nm |
| 0 – 100 km/h | 4,6 s |
| Vel. Máxima | 180 km/h |
La diferencia entre el modo de conducción ECO y Sport es especialmente notable, sobre todo en lo que se refiere a la respuesta al acelerador. En el modo ECO encontramos una respuesta más gradual y juraría que no pone a nuestra disposición toda la potencia posible, pero en el modo SPORT las reacciones son más instantáneas, poniendo toda la carne en el asador a la hora de pegarnos al asiento.
Baterías y autonomía del BYD Tang: su punto más débil
No podemos entender el BYD TANG sin entender su batería. Es de tipo LFP, litio-ferro-fosfato y tienen el formato «Blade», que la divide en hojas.
Esta química más limpia, segura, duradera y económica que las de ion-litio tradicionales pero con menor densidad energética. Esto significa que la batería pesa más para acumular la misma cantidad de energía.
Con 86 kWh de capacidad, su enorme masa y su desfavorable aerodinámica, homologa un consumo medio de 23,8 kWh/100km, que es bastante alto y se queda en unos más que escasos 400 km de autonomía teórica WLTP. La autonomía es el claro punto débil del BYD Tang, que queda muy limitado para hacer viajes largos.
Pero fijaos en esta tabla: su hermana berlina, el BYD HAN, consigue 120 km de autonomía adicionales y rebaja en 7 décimas la cifra de aceleración con una batería incluso más pequeña. La berlina es mucho más ligera y aerodinámica mientras el SUV aporta mucho más espacio y el plus de las 7 plazas, pagando a cambio una elevada factura energética.
| BYD TANG (SUV) | BYD HAN (berlina) | |
|---|---|---|
| Potencia | 380 kW (517 CV) | 380 kW (517 CV) |
| 0 – 100 km/h | 4,6 s | 3,9 s |
| Batería | LFP – 86,4 kWh | LFP – 85,4 kWh |
| Peso | 2.489 kg | 2.250 kg |
| Coeficiente aerodinámico | 0,33 | 0,23 |
| Consumo | 23,8 kWh/100km | 18,5 kWh/100km |
| Autonomía | 400 km | 521 km |
Rivales del BYD Tang
Analicemos ahora el precio del BYD TANG frente a sus rivales. Hablamos de coches 100% eléctricos de potencia parecida en formato SUV de 7 plazas.
En el momento de escribir estas líneas, en el mercado tendríamos el KIA EV9, tal vez el más parecido aunque con más autonomía y menos potencia, que se anuncia por un precio oficial de 85.000 €.
Un peldaño más arriba, con potencia idéntica al Tang y mucha más autonomía se sitúa el Volvo EX90 con un precio de 96.000 €.
| MODELO | Potencia | Autonomía | Precio |
|---|---|---|---|
| Kia EV9 | 384 CV | 497 km | 85.100€ |
| Volvo EX90 | 517 CV | 580 km | 96.304€ |
| BYD TANG | 517 CV | 400 km | 58.339€ |
Estas son las referencias.
Pues bien, el TANG tiene un precio de 69.900 € pero, si vas ahora mismo a un concesionario y seleccionas una unidad en stock, te lo dejan por un PVP de 60.339 € PVP sin más condición que la de unidades en stock. Si financias con la marca, te quitan otros 2.000 € más, dejando un increíble precio de 58.300 €. Como decíamos al principio, es mucho dinero, pero respecto al resto del mercado es un precio más que ajustado.
BYD Tang eléctrico
El Kia EV9 es un SUV 100% eléctrico con capacidad para siete pasajeros. Destaca por un diseño rompedor, por la última tecnología de la marca y por contar con unas calidades muy decentes. A todo ello debemos sumarle la etiqueta CERO de la DGT y que, bajo el ciclo WLTP, garantiza una autonomía de 505 kilómetros.
El Volvo EX90 es el hómologo 100% eléctrico del XC90. Estamos hablando de un coche que ofrece todo lo bueno del segundo pero aderezado por un diseño más moderno y por una tecnología más puntera. Claro está que se trata de un coche eléctrico, aunque desde la firma aseguran una autonomía de 580 kilómetros, distancia más que suficiente para abordar largos viajes con toda la familia.
Hongqi eHS9
La marca BYD ofrece 5 años de garantía total en todos sus modelos, un detalle muy a tener en cuenta.
Conclusiones
El BYD Tang es un coche brillante en casi todos los aspectos, por un precio francamente competitivo. Si lo comparamos con sus rivales eléctricos de 7 plazas, nos encontramos con coches menos potentes por 25.000 € más o coches de similar potencia por 35.000 k € más. Es muchísimo dinero.
Dicho esto, el punto débil del Tang también está bastante claro. Con una autonomía de tan solo 400 km homologados en ciclo WLTP tendremos una capacidad casi infinita para circular por ciudad, pero muy limitada para viajar por autopista, donde tendremos suerte si superamos la barrera de los 300 km sin recargar. Es el problema de todos los coches eléctricos, pero agravado en este caso por un peso enorme y una aerodinámica muy desfavorable.
¿Recomendaría esta compra? Si los viajes largos no son un factor crítico para ti, este coche es una ganga. Si piensas viajar mucho, me temo que el coche es casi implanteable.
BYD Tang 
