El Renault Austral vuelve a desvelar nuevos detalles sobre su diseño, y en esta ocasión se centra en el interior, y más concretamente en cómo será su nuevo sistema multimedia. A estas alturas el infoentretenimiento se ha convertido en uno de los grandes protagonistas de todo coche nuevo que llega al mercado, sin embargo esta fiebre por las pantallas no siempre cosecha buenas críticas. Pero en Renault quieren marcar un antes y un después, y por ello el Renault Austral usará un sistema multimedia que pretende sentar cátedra en la industria del automóvil.
Es justo admitir que Renault ha conseguido en los últimos años convertirse en una referencia del apartado multimedia, y no por el despliegue de recursos, conectividad o estética, sino por apostar por una visión práctica y de calidad a la hora de implementar estos sistemas. De hecho, la fórmula de Dacia es posiblemente el mejor ejemplo actual. En la industria es habitual el que veamos despliegues por todo lo alto donde el diseño y el concepto todo pantalla son el principal reclamo, sin embargo la experiencia de uso después muestra grandes carencias en ergonomía y rendimiento.
Pues bien, Renault y Google Automotive Services han desarrollado una nueva interfaz denominada como OpenR Link que promete ofrecer una de las mejores experiencias de manejo del momento. Para conseguirlo se ha trabajado en dos aspectos fundamentales, en primer lugar en la parte de hardware empleando un diseño de doble pantalla en forma de «L» capaz de alcanzar las 24,3″ (12,3 + 12 pulgadas), añadiendo el uso de paneles LCD con un tamaño de los píxeles incluso inferior al que ofrece un iPad y una nueva arquitectura que será más potente y capaz que cualquiera de las empleadas hasta ahora por la marca (Qualcomm Snapdragon Automotive Cockpit Gen 3).
En segundo lugar está el apartado de software, un aspecto crucial para conseguir una buena experiencia. Dado que el diseño del nuevo sistema se ha realizado desde el principio junto a la propia Google a partir de Android Automotive OS, este sistema promete un uso muy sencillo e intuitivo, tanto como para asegurar que el 90% de las funciones de uso habitual están a tan solo 1 o 2 pulsaciones. Además, la integración de los diferentes servicios y aplicaciones de Google es total, contando con actualizaciones periódicas del sistema, conexión a internet permanente y compatibilidad plena con Android Auto y Apple Car Play inalámbricos.
Y para rematar, hay un punto que creo que deberíamos tener en cuenta en positivo sobre esta interfaz, y es el hecho de que pese a esa apuesta por el todo pantalla, contará con mandos táctiles para el climatizador justamente bajo la pantalla central. Esto, que a priori puede parecer algo sin importancia, es un punto bastante importante para conseguir reducir las distracciones y facilitar el uso.
Todos estas ventajas sin duda habrá que probarlas in situ para valorar si realmente Renault y Google han conseguido cumplir con sus promesas, algo para lo que aún tendremos que esperar algún tiempo. Sin embargo, antes de conocer al nuevo Austral podremos ponernos al volante del nuevo Renault Mégane E-Tech, un coche que también instalará esta nueva interfaz, y que por lo tanto nos permitirá analizar a fondo las capacidades del nuevo sistema OpenR Link.
Interior del Renault Mégane E-Tech
Renault Austral 
