Subaru celebra este año el lanzamiento de sus sistemas de tracción total, y aprovechando la efeméride y las celebraciones, la marca japonesa ha decidido presentarnos la tercera generación de su crossover. El Subaru XV ya se llamaba Crosstrek en mercados como el estadounidense, pero ahora se llamará Subaru Crosstrek a nivel global. Es un coche completamente nuevo, aunque en verdad, es técnicamente una evolución del coche que ya conocíamos. Es un coche que gana claramente en atractivo, ¿pero tiene lo que hace falta para sobrevivir en pleno 2022?
Como os decíamos, este coche es de nueva factura, pero está construido sobre una evolución de la plataforma de su segunda generación, la plataforma modular Subaru Global Platform. La marca afirma que es más rígida y segura que antes, y sus paneles de carrocería son diferentes a los de la anterior generación. Con todo, el aire de familia es inconfundible, y aunque el Crosstrek se esfuerza – y consigue – en parecer más atractivo con nuevos faros, nueva calandra y pasos de rueda más agresivos, mantiene un claro aire de familia con su predecesor.
Con una longitud de 4,48 metros, 1,80 metros de nacho y 1,58 metros de alto, sus dimensiones son casi idénticas a las del vehículo saliente, salvo por una longitud adicional de 15 mm. El coche gana en frescura y gana en atractivo, y por dentro, también gana tanto en empaque como en tecnología. Aunque la consola central gana una nueva pantalla vertical de 11,6 pulgadas con el nuevo sistema Starlink de Subaru, pierde los mandos físicos de la climatización. Además, la marca tampoco ha equipado una instrumentación digital, manteniendo relojes convencionales.
El interior tiene un diseño bonito, pero peca de ciertos errores de ergonomía, manteniendo una profusión excesiva de botones en el volante – y prescinde de algunos de los que no debe. Los vanos de las puertas están forrados en un plástico texturizado que imita a las montañas y según versiones, podemos incluso equipar asientos de cuero. En cuanto a la mecánica, no hay sorpresa alguna: encontramos el mismo sistema e-Boxer, compuesto por un 2.0 atmosférico de cuatro cilindros opuestos, asociado a un pequeño motor eléctrico.
Técnicamente, es una mecánica full-hybrid, pero su motor eléctrico tiene poca potencia y está asociado a una batería muy pequeña. Las mecánicas se dan la mano a través de una caja de cambios de variador continuo. En otros mercados podría haber mecánicas más potentes, pero esa breva no caerá en el mercado europeo. Con todo, Subaru está un paso por detrás de otras marcas europeas y asiáticas en lo tocante a electrificación y reducción de emisiones: aunque acaban de lanzar un Subaru Solterra, no existen híbridos enchufables en una gama que no destaca por bajos consumos.
Además, la gama de motores sigue siendo muy poco variada. El lanzamiento global del Subaru Crosstrek tendrá lugar en 2023 y llegará al mercado a lo largo del año que viene.
Subaru Crosstrek 
