ESPACIOS
PUBLICIDAD
Cerrar CERRAR
Híbridos

4 MIN

Lo creas o no, este prototipo es clave para los futuros deportivos (híbridos) de Renault

Unas declaraciones de Patrice Ratti, CEO de Renault Sport Technologies, a la revista británica Autocar nos hacían pensar que el futuro de Renault Sport puede ser híbrido. Aunque Ratti no asegura que ese sea el rumbo a seguir por los RS de Renault, reconoce que la marca no ha cerrado esa puerta y que incluso estarían trabajando en dicha posibilidad. Ante lo cual no pude evitar recordar que hace menos de un año nos poníamos al volante de un prototipo que, a priori, ni luce deportivo, ni es un RS de pura cepa (ver prueba del Renault Eolab). Y contra todo pronóstico ya nos ofrecía las claves de cómo podría ser ese futuro RS híbrido de Renault.

El Renault Eolab se presentó con una promesa muy clara. En su interior escondía 100 innovaciones, algunas de las cuales aún no han sido explicadas con demasiado detalle – como su innovadora transmisión de tres relaciones – y Renault las guarda a buen recaudo, tal vez conscientes de que el día de mañana puedan jugar un papel fundamental en su gama de productos. Y esa promesa no era otra que el hecho de que 30 de esas 100 innovaciones estén en productos definitivos en 2016, un total de 50 en 2018 y un total de 90 en 2022.

Eso quiere decir que, en resumidas cuentas, prácticamente todas las innovaciones del Renault Eolab acabarán de una forma u otra en productos de Renault en los próximos siete años.

El Renault Eolab ya nos sorprendió por gozar de un tacto deportivo, en su dirección, en su empuje enérgico, o incluso en su puesto de conducción. Ya os decimos que no nos atreveríamos a decir que este prototipo mereciera el apelativo RS, pero sí se antojaba como un peculiar GTI venido del futuro para anticiparnos lo que conduciremos muy probablemente dentro de un lustro.

Por sorprendente que te resulte, el futuro de los Renault Sport podría conformarse con menos potencia que los modelos actuales. Algo que en el fondo nos congratula, que llegue la cordura en un momento en el que un pequeño-GTI o un deportivo compacto parecen no tener futuro con menos de 200 y 300 CV, respectivamente. El Eolab se conformaba con un motor TCe de 90 CV asistido por un motor eléctrico de 54 CV, y picos puntuales de 50 kW (68 CV). La clave de sus prestaciones no solo estaría en la hibridación, que se llevaría a cabo con baterías (o sistemas de acumulación de energía) muy ligeros, y prácticamente descartando la posibilidad del híbrido enchufable, sino también con esa misteriosa transmisión de tres relaciones de la que Renault nos proporcionará más detalles en los próximos años.

Y la razón por la cual los futuros Renault Sport se conformarán con motores híbridos y no necesitarán más potencia que los actuales no es otra que el peso. Renault espera que en los próximos años sea viable producir modelos con un uso más o menos extendido de materiales como el aluminio, el magnesio (en ciertos paneles y estructuras) y la fibra de carbono (por ejemplo en sus llantas). Un techo de magnesio solo pesa 4 kilogramos.

Y si os decimos que el prototipo que probamos el año pasado solo pesaba 955 kilogramos, y que un Renault Clio TCe de 90 CV – sin las baterías empleadas por el Eolab – pesaría solo 805 kilogramos si aplicásemos las soluciones empleadas en este prototipo, entenderéis que el margen para conseguir deportivos muy divertidos, ágiles y rápidos, sin necesidad de más potencia, es realmente alto.

Sigo teniendo mis dudas al respecto de que Renault pueda aplicar todas estas innovaciones en su gama, haciéndolo en un periodo relativamente corto de tiempo, apenas siete años, el ciclo de vida de un producto. Aún así, seguiremos confiando en la promesa de los franceses…

En Diariomotor:

Cargando...