La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil está de estreno. A su flota de coches y motos se acaban de incorporar nada menos que 85 unidades de los nuevos Land Rover Discovery. No son los pequeños Discovery Sport, son los Discovery a secas, grandes todoterrenos premium. Esta flota ha sido entregada a la Guardia Civil en un acto celebrado en Alcalá de Henares la semana pasada. Esta flota de 85 unidades habría tenido un coste estimado de cerca de seis millones de euros. Desde Diariomotor nos preguntamos si era necesario adquirir coches tan caros y equipados para las labores de patrulla del instituto armado.
Estas 85 unidades del Land Rover Discovery son las versiones «de acceso». Entrecomillo «de acceso» ya que estamos hablando de coches cuyo precio de partida es de 63.800 euros en estos momentos. Equipan un motor turbodiésel Ingenium de cuatro cilindros y 240 CV de potencia. Un motor que desarrolla 500 Nm de par motor, y que se asocia a un sistema de tracción total inteligente, además de a un cambio automático de convertidor de par y ocho relaciones. Tienen unas prestaciones simplemente correctas, lastradas por un peso de 2,2 toneladas: hacen el 0 a 100 km/h en 8,3 segundos.
Son coches destinados a labores de patrulla en carretera, aunque bien podrían haberse destinado a patrullas fuera del asfalto: tienen una altura libre al suelo de 22 cm y buenas cotas off-road – la reductora es opcional, y la equipan. No son coches especialmente eficientes, homologan un consumo medio de 7,4 l/100 km. Un consumo NEDC que en condiciones reales de circulación difícilmente bajará de los 8 o 9 l/100 km. Su equipamiento de serie es amplio incluso en sus versiones de acceso, equipando un completo sistema de infotainment o llantas de 19 pulgadas, con (carísimos) neumáticos en medida 235/65 R19.
Los 85 coches han sido transformados para su uso por la Guardia Civil, con un equipo de comunicaciones avanzado, un completo vinilado exterior y luces estroboscópicas, además de un sistema de sirenas. El precio de estos todoterrenos de 4,97 metros en esta versión arranca en 63.800 euros. No se ha publicado el coste de la compra de estos coches o su transformación, pero con una simple multiplicación superaríamos con holgura los cinco millones de euros de precio de tarifa. No dudo de la eficacia de estos Land Rover Discovery para cumplir su labor de patrulla, pero no pienso que sean la opción más idónea.
En primer lugar, por sus elevados costes de mantenimiento y costes operativos. El consumo real de estos monstruos de dos toneladas no es bajo, ni siquiera en carretera. Sus neumáticos y su mantenimiento no son caros, aunque estén incluidos en un cómodo paquete de leasing – en ocasiones es el mecanismo de adquisición de este tipo de flotas. Sea como fuere, se proyectaría una imagen más coherente con SUV compactos o rancheras con tracción total, como por ejemplo los SEAT León Xperience – que además se fabrican en España. En cualquier caso, entiendo que en el pliego de requisitos de la oferta pública podría existir la necesidad de un todoterreno.
En ese caso, coches como los Jeep Renegade Trailhawk cumplirían a la perfección. Incluso un Toyota Land Cruiser «pelado» saldría bastante más barato. Sea como fuere, os conmino a que valoréis esta decisión en la sección de comentarios.
Fuente: autonoción
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