Si alguien me pregunta qué imagen del WRC se me ha quedado marcada en la memoria, sin duda diría que son aquellas del fatídico Tour de Corse de 1986. No lo viví y sólo las he visto una vez, pero el nerviosismo, las voces temblorosas y los gritos de los responsables de Lancia tras el accidente sufrido por Henri Toivonen y Sergio Cresto se me han quedado grabados. A buen seguro, hoy, en la asistencia de M-Sport seguro que también se ha vivido una situación similar con, afortunadamente, final feliz.
Todo ha sucedido en el tercer tramo cronometrado del Rally de México. Ott Tänak rompía la suspensión delantera derecha en una compresión, perdía el control yéndose largo en una curva de izquierdas y tras dar una vuelta de campana, el Ford Fiesta RS WRC terminaba en una masa de agua. Rápidamente, tanto piloto como copiloto han salido del habitáculo, e incluso Molder se las ingeniaba para salvar las notas mientras el coche de M-Sport se hundía a gran velocidad y quedaba completamente sumergido en apenas medio minuto.
Obviamente, con el coche en el fondo del lago ni piloto, ni copiloto podían comunicarse con el equipo. Algo que ha provocado que se hayan disparado los peores pensamientos entre el equipo británico. Casi 20 minutos sin conocer el estado de sus pupilos, mientras el helicóptero de seguridad trataba de encontrar el Ford Fiesta RS WRC del que ya no quedaba ni rastro. Malcolm Wilson reconocía haber vivido uno de sus peores momentos. Todos tenemos el recuerdo demasiado reciente del accidente de Markko Martin y Michael Park en Gales. Por fortuna, esta vez todo ha salido bien.
Actualización: El equipo M-Sport está tratando de recuperar el coche en estos momentos, mientras que el copiloto de Tänak se encuentra tratando de secar el cuaderno de notas para mañana poder volver a la competición gracias a la normativa Rally2.
Recordad que para seguir el Rally de México al minuto, seguiré toda la actualidad de la prueba a través de mi cuenta personal de twitter: @fernischumi
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