Aunque pueda parecer que sí, no estamos tan lejos de un futuro completamente distinto dentro de la competición. La pila de combustible ya asoma en el horizonte, mientras que es cuestión de tiempo que la propulsión eléctrica cobre mucho más fuerza en disciplinas donde todavía no se había pronunciado. RallyCross, Le Mans o los Raids ya han tenido sus primeros escarceos y aunque queda un largo camino hasta la electrificación completa, no será de extrañar que lo podamos ver algún día.
Es por ello que me ha resultado muy interesante un Concept Car presentado por el grupo de diseño By Frank al concurso ideado por Michelin para 2017. Se trataría de un imaginario LMP1E de Tesla para participar en las 24 Horas de Le Mans de 2030, eso sí, sin implicar la tecnología autónoma en ello a través de visiones tan futuristas como la del propio vehículo de la ROBORACE (de la cual el propio diseñador ha augurado un rotundo fracaso en la historia que ha desarrollado para presentar su concepto).
Con la E blanca sobre fondo rojo que deja bien claro su carácter eléctrico, el primer prototipo del fabricante norteamericano se aprovecharía del avance en los sistemas de recarga y el desarrollo de las baterías, a través de un sistema del que ya se habla en la actualidad: los carriles de carga que podrían dejar a los famosos boxes del circuito de Le Sarthe únicamente para guardar los coches al terminar la jornada y para realizar reparaciones forzadas o el cambio de pilotos. En concreto, sería en la recta de Hunaudieres, entre las dos chicanes un lugar perfecto para situar dicho pit lane, en el que sería el piloto automático el encargado de mantener el LMP1 la velocidad.
La utilización de la tecnología Hyperloop ha llegado a las carreras de mano de Tesla, algo que les ha permitido alcanzar hasta 452,8 km/h en Mulsanne, mientras los coches están equipados por un nuevo tipo de neumáticos, mucho más ligeros y fabricados en impresoras 3D que facilitan la disipación del calor de los motores eléctricos situados en cada rueda y que además ayudan a recargar las baterías por fricción. La evolución tecnológica no sólo ha llegado a los coches, los aficionados también se podrán beneficiar del desarrollo de la Realidad Virtual y Aumentada para seguir las carreras, mientras que el elegante color de librea que viste el Tesla LMP1E podría mostrar a cada momento distintos datos para el aficionado sobre la propia silueta del coche, así como anuncios que sigan manteniendo vivas las carreras. Después de lo visto durante estos últimos años, ¿a alguien le suena descabellado todo esto?
Diseño realizado por DESIGN BY FRANK
