Lewis Hamilton logra en Spa-Francorchamps su quinta victoria del año. Los Ferrari hundidos

El Gran Premio de Bélgica no será recordada por una de las carreras más imprevisibles de lo que llevamos de temporada después de haber eliminado la variable de la lluvia anunciada por las previsiones. Quinta victoria para Lewis Hamilton en lo que llevamos de temporada, mientras que Max Verstappen subía al podido en lo que ha sido uno de los peores fines de semana que se recuerden de los hombres de la Scuderia Ferrari, sin opciones ni siquiera de luchar por el podio.

Todavía con la camiseta de la lucha contra el racismo, Carlos Sainz se paseaba entre los miembros de las distintas escuderías. El madrileño era el centro de todas las miradas, ya vestido con pantalones de calle en un momento en el que debería estar ya con el mono ignífugo de McLaren vestido. Un fallo en el escape del MCL35 lo dejaba fuera de carrera antes incluso de que esta empezara, por lo que el noveno lugar que debía estar ocupado por el dorsal #55 quedaba vacante en parrilla.

Desde este punto, la tónica de toda esta temporada se cumplía, con una salida muy limpia en la que ni tan siquiera la primera curva, esa horquilla en la que se han visto numerosos choques múltiples. Los Renault inquietaban en el arranque a Max Verstappen, mientras que los Ferrari no lograrían dar grandes pasos en un fin de semana que debería ser un punto de inflexión a los de Maranello después de haber alcanzado su punto más bajo, con los dos monoplazas fuera de las posiciones de puntos.

La carrera era toda una tortura para los dos monoplazas del cavallino, con Leclerc obligado a hacer dos paradas y pidiendo explicaciones a través de la radio que no llegarían. Si el monegasco quedaba relegado a la última posición, la situación de Sebastian Vettel no sería mucho mejor, superado por velocidad por hombres como Daniil Kvyat y sin poder adelantar a Kimi Räikkönen durante gran parte de la prueba.

Mientras que Verstappen conseguía contener a Esteban Ocon y Daniel Ricciardo a pesar de un incisivo piloto australiano, las posibles variaciones en cuanto a estrategia se eliminarían después del accidente sufrido por George Russell, el cual le costaría también la carrera a un Antonio Giovinazzi que no podía esquivar al Williams trompeado del piloto británico.

Con las posiciones de cabeza ya estables, tanto Lewis Hamilton como Valtteri Bottas comenzaban a sufrir con los neumáticos. Los dos pilotos de Mercedes-AMG F1 se pasaban de frenada y bloqueaban la rueda delantera derecha en la chicane que desembocaba en la recta de meta. Inmediatamente desde el muro de boxes les daban las directrices para que evitaran tocar los kerbs con la rueda delantera derecha, quizás por miedo de volver a sufrir un nuevo pinchazo.

No hubo sorpresas en esta ocasión y Lewis Hamilton lograba su quinto triunfo del año (está a dos victorias de Michael Schumacher) después de los alcanzados en Estiria, Hungría, Gran Bretaña y España. Tras él, Verstappen y Bottas completaban el podio, mientras que Renault F1 Team disfrutaba mucho de un gran resultado que los situaba provisionalmente como el tercer mejor equipo, aprovechando que tanto Ricciardo como Ocon habían mostrado más velocidad que Lando Norris o un Alex Albon que empieza a verse amenazado por el buen estado de forma del expiloto de Red Bull Racing, Pierre Gasly. Incluso saltaba la sorpresa al ver cómo Daniel lograba la vuelta rápida en el último giro.

Los Racing Point F1 Team volvían a perder una oportunidad de oro para sumar una buena cantidad de puntos y contrarrestar los 15 perdidos tras la decisión de la FIA. Stroll y Pérez ocupaban las últimas plazas con derecho a puntos, mientras que los Ferrari terminaban 13º y 14 en una carrera para olvidar en el caso de Sebastian Vettel Charles Leclerc.

Clasificación final del Gran Premio de Bélgica 2020: