Convertido en toda una leyenda del todoterreno, aunque también ya a estas alturas de los automóviles de lujos, este 4×4 de dilatada reputación está a punto de descubrir su motorización más capaz y avanzada para la práctica todoterreno. Sin embargo la polémica está servida, pues esta nueva versión totalmente electrificada, también supondrá reinventar por completo la forma en que entendemos el off-road.
El mejor 4×4 que ha fabricado nunca Range Rover
Más vale que vayamos asumiendo el que en términos de conducción todoterreno, estamos asistiendo a una verdadera revolución a través de los motores eléctricos, pero no sólo por su mayor eficiencia energética, sino por las mucho mejores capacidades de tracción que ofrece esta tecnología de propulsión.
Es por ello que la inminente presentación de un Range Rover 100% eléctrico debemos entenderla como un verdaderao hito, pues por primera vez en la historia del constructor inglés vamos a tener en las calles un 4×4 eléctrico, prometiendo además las mejores capacidades que hayamos visto nunca en un vehículo de su clase.
Culminando su programa de desarrollo en condiciones de uso extremas, el Range Rover Electric ha sobrevivido a temperaturas desde -40 hasta +50 ºC, poniendo a punto además su nuevo control de tracción que, a todos los efectos, será la clave para conseguir que este nuevo todoterreno no sólo sea tan bueno en off-road como sus alternativas térmicas o híbridas, sino mejor en esas circunstancias.
Que los coches de Land Rover cuenta en la actualidad con uno de los mejores controles de tracción del mercado para hacer todoterreno, es algo que ha quedado demostrado en nuestras pruebas 4×4 en el circuito de Ocaña. Pero con la electrificación todo eso ha tenido que reinventarse por completo, pues el contar únicamente con motores eléctricos supone cambiar por completo la forma de entender la tracción.
Para empezar, JLR confirma haber conseguido reducir el tiempo de reacción de alrededor de 100 ms a 1 ms en cada rueda, sacanado así partido del par instantáneo que brindan los motores eléctricos. Ahora será la electrónica que gobierna los sistemas ABS, TCS y ESP, la encargada de reeemplazar todo el esquema de transmisión tradicional que necesitaba un todoterreno.
Y es que si bien por el momento JLR sigue mostrándose bastante escueta a la hora de detallar la técnica del Range Rover Electric, todo apunta a que este nueva versión recurrirá a una configuración de dos o tres motores eléctricos, pero sin integrar reductora o bloqueos de diferencial, algo que por ejemplo sí que ha prometido instalar el Mercedes Clase G eléctrico (Clase G 580 EQ).
Aún así, y aunque será nuestro circuito el encargado de dictar sentencia, todo hace presagiar a que el Range Rover Electric está llamado a convertirse en el mejor modelo de la marca a la hora de hacer todoterreno extremo.
Range Rover 
