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Nuevo Audi R8: más LED, más fibra de carbono y nuevo cambio DSG de 7 relaciones

El nuevo Audi R8 por fin debuta de manera oficial, el deportivo de la firma de Ingolstadt recibe un sutil lavado de cara exterior para acoger un mayor avance tecnológico y una firme revisión de todo el apartado técnico. Con miras para afrontar su etapa final de vida ha apostado por una mejora prestacional de sus propulsores a la par que una mejora de eficiencia adoptando soluciones y diseños como la nueva transmisión de doble embrague y 7 relaciones.

Las siglas CFRP, GFRP Y ASF son las bases del nuevo R8: plásticos reforzados con fibra de carbono, plásticos reforzados con fibra de vidrio y construcción ligera en Aluminio son sus significados respectivamente. Las cifras de consumo se ven reducidas levemente en torno a 0.8 l/100 Km tanto en la versión con motor 4.2 V8 (430 CV) como en la versión 5.2 V10 (525 & 550 CV). La principal novedad será la incoporación del cambio de doble embrague denominado S tronic con 7 relaciones sustituyendo al anterior cambio manual pilotado de 6 relaciones R Tronic.

Nuevo Audi R8: tecnología LED para ver más y mejor

Un aspecto importante del diseño del nuevo Audi R8 será su iluminación integral LED en toda la gama. Un nuevo elemento que estará instalado como equipamiento de serie desde la versión de acceso con motor V8 y cambio manual hasta el nuevo tope de gama denominado Audi R8 V10 PLUS. El rediseño de los faros principales busca albergar una mayor eficiencia en el funcionamiento de los distintos tipos de diodos, además de mejorar el haz que proyectan según las necesidades de iluminación y una nueva identidad.

Tanto faros como pilotos ahora emplean de serie un sistema de iluminación LED para todas las funciones

En la zona trasera también es la tecnología LED la encargada de proyectar toda la información concerniente a sus pilotos. Nuevas formas para unos grupos ópticos que estrenan un sistema de proyección móvil para indicar la dirección a la que se pretende girar. De este modo, al accionar el intermitente, el indicador no se limitará a iluminar una señal, sino que los LEDs determinados proyectarán dicha dirección conforme al sentido de giro.

Como equipamiento opcional también podremos añadir una iluminación LED del vano motor, pudiendo así ofrecer una imagen más nítida del propulsor cuando éste sea contemplado a través del cristal que actúa como capó.

Materiales reforzados, la evolución que prescinde del metal

El empleo masivo de Aluminio y materiales compuestos reforzados con fibra de carbono arrojan diferencias de peso de solo 10 Kg entre el motor V8 y el motor V10

Pese a que el Audi R8 es uno de los máximos estandartes de la tecnología ASF de Audi para confeccionar automóviles partiendo del Aluminio, la adopción de materiales reforzados con fibra de carbono sigue creciendo con esta nueva actualización. Recordemos que Audi está desarrollando de manera muy activa la evolución de este tipo de polímeros para sus futuros modelos, el siguiente paso evolutivo tras el diseño ASF será adaptar sus modelos para ser fabricados con materiales compuestos reforzados con fibra de carbono, tecnología Audi MSF.

Audi emplea esta serie de materiales fabricados con CFRP en el nuevo R8 en elementos tales como el difusor trasero, las branquias laterales, el difusor delantero opcional o los propios asientos construidos en un proceso que emplea la fibra de vidrio como material de refuerzo. Este empleo masivo de materiales compuestos y Aluminio reflejan diferencias de peso de solo 10 kilogramos entre la versión coupe V8 manual (1.560 Kg) y la versión V10 con cambio DSG (1.570 Kg).

Un Audi R8 más rápido y eficaz

La novedad más importante sigue siendo la inclusión del cambio automático de doble embrague con 7 relaciones. Un cambio que deja en el olvido al cambio manual robotizado R Tronic aportando mejoras sustanciales en todos sus campos de ejecución. La realización del 0-100 Km/h mejora en 0,3 segundos respecto al cambio manual de 6 relaciones en todos los propulsores, 4,3 segundos para el V8 con cambio S Tronic y 3,5/3,6 segundos para los motores V10 con idéntico cambio. Además, su control electrónico del par junto con la tracción integral quattro y la suspensión magnetoreológica garantizan el mejor reparto de la tracción entre ejes.

Otro elemento de importante calado en el rendimiento y especial repercusión en el peso son los frenos. Factor determinante a la hora de hablar de un deportivo y que en el nuevo Audi R8 se solucionará con dos sistemas de frenado distintos: uno de ellos incluirá discos combinados de Acero en la zona de fricción y Aluminio en el montante con un diseño en forma de onda bastante peculiar. Mientras que la opción de frenos carbonocerámicos ofrecerá el máximo de prestaciones a la par que el menor peso.

Esta actualización del R8 hará perdurar la vida del deportivo unos pocos años más hasta la llegada de su sustituto. Precisamente será esta última actualización junto a la llegada de su variante eléctrica Audi R8 e-tron las que servirán para despedir a esta primera apuesta 100% sport del fabricante de los cuatros aros.

Fuente: Audi
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