Skoda ha puesto ligeramente al día al Skoda Octavia y nos ha presentado de paso un Skoda Octavia 1.0 TSI de 115 caballos que sustituye al 1.2 TSI. Además de la introducción de este propulsor, la alternativa en forma de berlina a compactos como el SEAT León estrena novedades de equipamiento entre las que destaca el “chasis adaptativo” DCC.
Además de montar un motor de 3 cilindros hay nuevos detalles como el chasis adaptativo o la posibilidad de cargar nuestro móvil por inducción:
De este modo nos encontramos, ligado al grueso de motorizaciones (desde los diésel y gasolina de 150 caballos), con el sistema DCC (Dynamic Chassis Control) que nos permite regular a golpe de botón la dureza de la dirección y de la suspensión entre los modos Comfort, Normal y Sport, un detalle que ya conocíamos de sus “hermanos” de Volkswagen o SEAT.
Además junto a este sistema y el mencionado nuevo propulsor hay novedades de equipamiento incluyendo un nuevo filtro para el climatizador, la posibilidad de montar iPads tras los reposacabezas delanteros, un paraguas opcional bajo el asiento del acompañante y un sistema de lavado para la cámara de marcha atrás, también opcional.
También se ha equipado una segunda generación de sistema multimedia permitiéndonos controlar ciertas funciones desde nuestro smartphone o tablet y contando con conexión Wi-Fi en las versiones más altas.
Por último se añade como opción el sistema Skoda Phonebox que nos permite cargar por inducción nuestro teléfono y conectarlo a la antena del coche sin necesitar un cable, mejorando así la recepción de datos y la calidad de las llamadas.
Skoda Octavia 
