Hace algunos días atrás, desde el equipo Vasser-Sullivan Racing manifestaron su intención de que uno de sus dos Lexus RC F GT3 compitiera en la clase GTD-Pro en tanto el otro permanecería en la clase GTD, situación que llamó la atención de David Wilson, presidente y gerente general de Toyota Racing Development, quien no se mostró muy convencido de la propuesta porque considera que básicamente la IMSA, a través de un Balance of Performance, pretende crear una parcela muy confusa en la cual los GTLM se aproximen a los GTD que a su vez son coches GT3, segmento donde no deberían estar involucrados directamente los fabricantes.
Según su opinión, la clase GTD es la más saludable dentro del Campeonato IMSA WeatherTech SportsCar, la cantidad de coches que allí participa es superior al resto de las clases combinadas, lo que concede una idea de lo que significa para la categoría. En tal sentido, cree que sería mejor apuntar hacia la simplificación y no crear una división de GT que no orienta a ninguna parte. En su reflexión, opina que para los espectadores será muy confuso observar a dos coches aparentemente iguales compitiendo en distintas clases.
Explicó que ha sostenido reuniones con Jeff Bal, gerente del área deportiva de Lexus, y John Doonan, presidente de la IMSA, hablando de lo que sería la GTD-pro, porque más allá de ciertos cambios en las regulaciones técnicas y deportivas, como la clasificación de los pilotos, el uso de los mismos neumáticos, Michelin Pilot Sport S9M, y ciertos elementos como el limitador de reabastecimiento de combustible, se está en presencia de una subclase GT3 que pretende llenar el vacío que dejará la GTLM.
Según su opinión, actualmente la IMSA posee la mejor clase GT3 del automovilismo y establecer una nueva división como la GTD-Pro podría ser un paso en falso debido a que en teoría no hay mayor diferencia entre una y otra. Indicó que en reiteradas ocasiones ha advertido que la organización debe ir por el camino de la simplicidad, por tal razón va a esperar que se publiquen todas las reglas para tener nociones de hacia dónde van las cosas. Si advierte que el panorama sigue muy confuso, lo más probable es que convenza a Vasser-Sullivan de que permanezca dónde está.
En palabras de David Wilson:
La clase GTD es la clase más saludable en este garaje semana tras semana. Tratamos de ver esto desde la perspectiva del espectador. Aquí es donde tenemos que actuar con cuidado. Creo que la IMSA todavía no tiene todo resuelto en ese sentido. Si soy un fanático y desde las tribunas veo dos Lexus, dos Porsche y tres Lamborghinis, no tendré idea de que cuál es GTD Pro o GTD, porque es la misma homologación FIA GT3, es el mismo BoP con el mismo caudal de combustible y neumáticos.
Vía | Sportscar365
