Toyota manda en las primeras horas en Le Mans con el debut de Fernando Alonso

Fernando Alonso ya ha debutado oficialmente en las 24 horas de Le Mans, después de haberse subido al Toyota TS050 número 8 pasadas dos horas y media desde la salida. El piloto español reemplazó a un Sébastien Buemi que fue protagonista en unos moviditos primeros instantes de carrera. A pesar de todo, los dos Toyota mandan con autoridad y tienen ya una vuelta de ventaja con respecto a sus rivales más cercanos. En todas las categorías hubo ya los primeros líos con toques en LMP1, problemas técnicos en LMP2 y algún accidente en las clases de GT. Le Mans golpea desde el inicio, pero con 21 horas por delante, aún queda mucho por ver. Pasadas las tres primeras horas, Fernando Alonso está en pista en segunda posición, mientras el Corvette de Antonio García y el Ferrari de Miguel Molina (también en pista) se mantienen en la vuelta del líder de GTE-Pro.

LMP1

La acción en la carrera comenzó, de la mano de LMP1, desde el mismísimo momento de la salida. Camino a la chicane Dunlop, André Lotterer intentó atacar por el exterior al Toyota número 8 de Buemi, que cerró la puerta moviéndose hacia el exterior. Un leve toque entre ambos hizo que el Rebellion número 1 fuera largo en la primera curva, dañara el frontal de su coche y acabara contactando con el DragonSpeed de esta misma clase, lanzado en un trompo como víctima inocente. El coche de Lotterer tuvo que completar la primera vuelta a velocidad reducida y parar a boxes para cumplir con las reparaciones pertinentes al haber perdido el frontal. A partir de entonces, Toyota empezó a marcar el esperado ritmo superior, con los coches 7 y 8 intercambiando posiciones en varias ocasiones y manteniendo en todo momento el liderato.

Algo más atrás, drama para el SMP de Jenson Button. Con Vitaly Petrov al volante, el coche sufrió problemas técnicos y tras solo 18 giros completados, está ya a más de 30 de los líderes y parece difícil que pueda volver a pista. Incluso si lo hace, tanta distancia con respecto a los demás acaba con cualquier opción que tuvieran en carrera. Por su parte, Tom Dillmann estuvo a punto de ‘liarla’ al trompear en la vuelta de formación al volante del ByKolles. Esto hizo que el coche con motor Nissan LMP1 tuviera que partir desde el fondo de parrilla. A estas alturas de carrera, está ya en el top 10, dejó atrás a los terriblemente poco competitivos Ginetta de Manor y tiene por delante solo a los dos primeros clasificados de LMP2, además de los principales equipos de la clase reina, entre los que están los Toyota, los Rebellion incluyendo al 1 con una buena remontada y el superviviente SMP.

LMP2

En la clase LMP2, la variabilidad habitual se apoderó del inicio de carrera… siempre por las posiciones retrasadas. En cabeza, el Oreca de G-Drive se situó en primera posición pronto y empezó a marcar el ritmo, sin dar opciones a sus rivales. El único equipo aparentemente capaz de seguirles de relativamente cerca, el siempre competitivo pero a menudo involucrado en situaciones peculiares Alpine número 36 de Signatech. La mezcla de Oreca, Alpine y Ligier en las primeras posiciones mantiene la variada clase de LMP2 con opciones abiertas para una gran parte de los participantes. Tanto es así que los primeros ocho clasificados están aún dentro de la misma vuelta, siendo por lo tanto el noveno el primer doblado.

Entre los equipos con problemas, el Jackie Chan DC Racing tuvo que sufrir situaciones desagradables como el pinchazo del número 38 y los problemas técnicos del número 37 que le hicieron caer lejos del gran grupo de LMP2 en la clasificación general. Mientras tanto, el United Autosports en el que milita Juan Pablo Montoya ocupa la séptima posición. El colombiano es el piloto en activo que más cerca está de obtener la triple corona, habiendo ganado el Gran Premio de Mónaco y las 500 millas de Indianápolis, aunque con un LMP2 de media tabla, es imposible hablar de ganar las 24 horas de Le Mans. Para él, la edición de este año deberá servir para entender cómo funciona Le Mans antes de lanzarse a por la conquista de la mítica prueba en un coche competitivo.

GTE-Pro

Después de la sesión clasificatoria, el BoP sufrió algunos cambios para igualar las cosas de cara a la carrera. De esta forma, los GT tenían algunos cambios de variada importancia. Los cambios más remarcables, los 10kg de más para los Porsche y los 8kg de más para los Ford. En cuanto a los coches que pierden peso, BMW y Aston Martin reducen en 10kg su carga, con Chevrolet perdiendo 5kg. Ferrari mantenía el peso, con un kilogramo más de gasolina permitido. A pesar de todo, los primeros compases de carrera vieron a los Porsche en las primeras posiciones, mandando con sus coches número 91 y 92 con colores históricos. Tras las primeras tres horas, Porsche y Ford mandan en la carrera, copando las cinco primeras posiciones. Los pilotos españoles sobreviven en la categoría aunque algo más atrás de lo previsto.

Antonio García sufrió problemas con un neumático que hicieron que el Corvette número 63 perdiera un tiempo importante, además de darle un susto al piloto español, que se encontraba a bordo del coche en el momento. Ahora mismo es Jan Magnussen quien está pilotando. Por su parte, el Ferrari de Miguel Molina está a las puertas del top 10 y con el catalán en pista, peleando en la que probablemente sea la clase más igualada y más competida de la presente edición de las 24 horas de Le Mans. Muchos problemas para los Ferrari, fuera del top 10, y para los Aston Martin, a la cola de la clasificación. Algo mejor están los BMW, aunque no parecen poder pelear con los actuales dominadores de una clase que parece estar bastante polarizada a pesar de los cambios en el BoP previos a la carrera.

GTE-Am

En GTE-Am, los problemas los protagonizó el Porsche número 86, que perdió el control del coche y acabó contra las barreras en la curva Indianápolis, con todo lo que ello implica a nivel de verse obligado a volver a boxes para las reparaciones pertinentes. Por otra parte, Porsche mantiene también una posición fuerte en la menor de las categorías de las 24 horas, con el coche número 77 de Dempsey-Proton Racing en primera posición y su compañero de equipo en tercer puesto. El tercer 911 RSR ocupa la quinta posición y se alternan con los Ferrari 488 GTE de JMW Motorsport y Spirit of Race. La pelea entre los italianos Cairoli y Fisichella mantuvo la acción elevada en su clase. La carrera en si tiene mucho por delante aún y con más de diez coches en la misma vuelta que el líder, la igualdad hace que haya aún opciones para prácticamente todos los participantes.