Para muchos, que las mecánicas eléctricas estén irrumpiendo en el sector de los deportivos es un todo un despropósito, incluso ultraje. Sin embargo, marcas como MG no ven inconveniente alguno en hacerlo, especialmente cuando se excusan en su legado. Y así lo dejan patente con el que promete ser el deportivo más polémico de los últimos tiempos, el MG Cyberster, o lo que es lo mismo, un descapotable 100% eléctrico que aterrizará en España en agosto de 2024.
El MG Cyberster no tiene aún precio, pero sí fecha de llegada
Aunque bien es cierto que el dato más revelador del deportivo chino será su precio, de momento la marca lo mantiene en secreto. Sin embargo, sí que se ha atrevido a confirmar que este estará muy por debajo de los 100.000 euros y, por ende, de algunos de sus rivales más directos, como el Jaguar F-Type o el Aston Martin Vantage.
A ello hay que sumarle que el MG Cyberster llegará a España con dos baterías disponibles, siendo una de 64 kWh y otra de 77 kWh, es decir, las mismas que emplea el MG4. Con ellas, el descapotable podrá cubrir más de 500 kilómetros de autonomía, dato que variará en función de si escogemos la variante de propulsión lo de tracción total, las cuales estarán disponibles en nuestro país.
Y pese a que de momento no se ha hablado de potencias, MG sí que ha aprovechado la ocasión para indicar que el Cyberster es capaz de cubrir el 0 a 100 en el entorno de los 3,6 segundos en su variante de 544 CV. También han dado otro dato de velocidad, y es que el descapotable chino se asienta como el vehículo de producción con la capota más rápida del mundo tanto en pliegue como despliegue, aunque eso sí, no han dado cifras concretas.
Sea como fuere, y obviando lógicamente el más que interesante dato del precio, resulta sumamente interesante saber que MG no tiene cupo de producción para el MG Cyberster. Esto se traduce en que, en caso de estar interesados en el coche, podremos respirar tranquilos al saber que tantas unidades como así lo demande el mercado español.
¿Cómo es el MG Cyberster en directo?
Pero la gente de MG no nos proporcionó estos datos por medio de un mail o una nota de prensa, sino en directo y acogidos por el amparo del propio Cyberster. Y aunque bien es cierto que aún no se nos ha brindado la oportunidad de conducirlo, sí que hemos podido verlo, tocarlo y sentarnos en una unidad de producción.
El diseño es, al fin de cuentas, subjetivo, y a uno le podrá gustar más o menos, pero lo que está claro es que es un coche que impone y que girará cabezas por donde pase. Su diseño afilado, agresivo y tenso se ve arropado por unas puertas tipo tijera que terminan de darle el toque final de deportivo. La zaga acompaña con unos pilotos LED que recorren todo el portón y que culminan en unas especie de flechas que actúan como intermitentes y que, personalmente, es lo único que no me termina de convencer de la estética.
Sea como fuere, lo que está claro es que, por dimensiones, diseño e intenciones, el MG Cyberster no busca rivalizar con un Mazda MX-5 como se apuntaba en un inicio. Al fin de cuentas, estamos hablando de un coche no solo más capaz, sino también más grande con 4,53 metros de largo.
Ahora bien, muchos son los escépticos con las calidades interiores de los coches procedentes de China pero, ¿realmente el MG Cyberster da motivos para que sigan siendo escépticos? Lo cierto es que nos encontramos con un habitáculo muy bien rematado, agradable al tacto y con aparentes materiales de buena calidad, así como ajustes bastante buenos que no dejan entrever ni crujidos ni movimientos de las piezas.
En resumidas cuentas: el MG Cyberster quiere romper con todo lo establecido por los deportivos hasta la fecha de la mano de prestaciones de primer nivel junto a un precio ajustado. ¿Esto quiere decir que será un coche apto para todos los bolsillos? Desgraciadamente no, pero entendiendo que su precio estará en el entorno de los 60.000 euros, será un coche que abrirá las puertas del segmento de los deportivos a aquellos que estaban valorando, por ejemplo, la compra de un compacto deportivo. Otra cosa distinta es que el Cyberster consiga convencerlos.
