El nuevo Toyota Land Cruiser está haciéndole ojitos a todo amante del 4×4 que se precie, y no es para menos. Pero ha llegado a tal punto, que son muchos los que se han olvidado de su anterior generación, y eso es un craso error. ¿Por qué? Porque la generación posterior del Land Cruiser no solo es un gran todoterreno, sino que también puedes comprarla aún nueva por 20.000 euros menos de lo que pide Toyota por la actual.
Aún puedes hacerte con el anterior Toyota Land Cruiser, y ahorrarte 20.000 euros
Aunque bien es cierto que ahora ahondaremos en los puntos álgidos del también llamado Land Cruiser 150, la oferta resulta interesante porque se trata de un precio al contado. No, no todo el mundo tiene los 56.400 euros que pide la marca por el anterior Land Cruiser, pero son más asumibles que los 76.450 euros que implica el nuevo.
Pero debemos saber que, para mantener esos 20.000 euros de ahorro, es necesario acogernos a la configuración más básica del 4×4 japonés. Esto implica el color blanco, llantas de 17 pulgadas de chapa y el equipamiento básico. Aunque me vais a permitir que añada que, personalmente, me parece bastante atractivo que un 4×4 se vea lo más básico posible.
Sea como fuere, esto implica un equipamiento de serie conformado por las ya mencionadas llantas de 17 pulgadas, acceso y arranque sin llave, climatizador manual y pantalla de 9 pulgadas con conexión con Apple CarPlay y Android Auto entre otros.
Pero, tal y como ya ha mencionado mi amigo y compañero Juanma en algún otro vídeo sobre el Land Cruiser o la Hilux, lo importante no se ve. Y con ello me refiero a un robusto motor de cuatro cilindros y 2.7 litros turboalimentado que desarrolla 204 CV y 420 Nm de par. Son cifras que se gestionan por medio de una caja manual de seis relaciones y, aunque las prestaciones no son demasiado trascendentes en un 4×4 puro y duro, podemos cubrir el 0 a 100 en 12,1 segundos y alcanzar una velocidad punta de 175 km/h.
Y es que lo realmente trascendente es un sistema de tracción total con reductora, bloqueo de diferencial central y un ángulo de ataque de 31 grados, uno de salida de 26 grados y uno ventral de 22 grados. A ello hay que sumarle un chasis de largueros y travesaños ideal para hacer 4×4 sin miedo alguno.
Su producción se detiene de momento
Y aunque bien es cierto que la oferta es sumamente tentadora, un comunicado de última hora de Toyota adelanta que, de manera temporal, se detiene la producción tanto del Land Cruiser que hoy nos ocupa como de la Hilux.
Este parón se debe a que se han detectado irregularidades en el proceso de certificación de sus motores diésel. Concretamente, los 1GD, 2GD y F33A producidos por Toyota Industries Corporation (TICO) son los afectados, siendo estos certificados empleando una centralita con un software diferente al empleado por los vehículos fabricados y vendidos con esos mismos motores.
No obstante, desde Toyota aseguran que no afectaría en ningún caso al rendimiento de los vehículos afectados, ni tampoco “habría necesidad de dejar de utilizar los motores o los vehículos afectados”.
Las alternativas del Toyota Land Cruiser
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