El reglamento de la FIA permite que los World Rally Cars reciban este invierno la última gran evolución antes de que el actual reglamento que los contempla caduque a finales de 2016. Para entonces, fabricantes, FIA, suministradores de neumáticos y promotores deberán haberse puesto de acuerdo con las nuevas reglas y características técnicas que tendrán los WRC a partir de 2017. Hasta entonces, vamos a centrarnos en el presente y haremos un repaso a las novedades que traerán los cuatro equipos que actualmente se encuentran involucrados en el campeonato.
Empezaremos con los encargados de defender el título, Volkswagen Motorsport, que según lo que hemos visto durante los test previos al Rallye de Monte-Carlo 2015, han optado por la continuidad. Por ello no han cifrado en más de un 20% las diferencias entre el modelo actual y el de la próxima temporada, haciendo leves cambios de diseño en el alerón trasero y en los pasos de rueda para mejorar aún más la estabilidad del Polo R WRC.
Las principales novedades estarán obviamente en la utilización de nuevo del cambio de marchas por leva detrás del volante, así como la de un bloque motor más ligero, aprovechando que la FIA ha permitido a los equipos reducir el peso en este apartado. Por lo que se ha visto en las imágenes de las pruebas de pretemporada, el coche es aún más estable, capaz de trazar con tiralíneas las siempre complicadas carreteras de montaña galas. Si a ello le unimos que siempre han sido sinónimos de fiabilidad alemana, los de Wolfsburgo siguen siendo el rival a batir en 2015.
Citroën tuvo el honor de ser el primero del resto en 2014. Subcampeones en el apartado de marcas y tras arrasar en el Mundial de Turismos, la firma de los dos chevrones decidía ponerse a trabajar en el DS3 WRC, confirmando que será la mayor evolución del coche desde su debut en 2011. La principal área de crecimiento será el motor, que a partir de ahora será un derivado del propulsor que lleva el C-Elysèe TC1 en el WTCC y que a buen seguro les traerá algunos caballos de potencia extra. Las otras partes a modificar serán cambio (también de levas), suspensiones y aerodinámica.
Al igual que el Polo, el DS3 ha estrenado un spoiler trasero nuevo durante los primeros test sobre la tierra lusa, con unas líneas mucho más suaves y sin tantos aditamentos aerodinámicos que se pusieron de moda con los anteriores WRC 2.0 turbo. Sobre el papel, franceses y alemanes serán los únicos que podrán poner sus definitivos coches en la salida del próximo Monte-Carlo, mientras que los otros dos fabricantes involucrados en el campeonato deberán esperar. A pesar de ello, Citroën seguirá introduciendo pequeños paquetes de mejoras durante el año aprovechando los jokers que tienen a su disposición los equipos para actualizar sus coches fuera de los periodos marcados por la FIA.
En el caso de M-Sport, el Ford Fiesta RS WRC también promete un gran salto evolutivo. Sin embargo, este no se producirá hasta el Rally de Portugal. Las levas de cambio previsiblemente si llegarán para la cita monegasca que abre la campaña 2015 e incluso Elfyn Evans y Ott Tänak ya han estado testando un sistema neumático similar al que utiliza Robert Kubica, pero no se espera que sea hasta la cita lusa cuando los hombres de Malcolm Wilson pongan toda la carne en el asador y estrenen un nuevo bloque motor (escape, electrónica, refrigeración…), además de mejoras en la transmisión y algunos cambios aerodinámicos. En total, desde Cumbria señalan que el Fiesta será más de un 50% distinto al actual.
Hyundai se lleva sin duda el premio al más innovador. Los coreanos estrenarán modelo a mitad de la próxima campaña, siempre y cuando quede patente la mejora en el rendimiento comparándolo con el actual Hyundai i20 WRC. El nuevo World Rally Car, segundo salido de la factoría de Alzenau, será construido sobre la base de la versión coupé de la nueva generación i20 y según Michel Nandan será hasta un 90% distinto al coche que consiguió en el Rallye de Alemania la primera victoria para la marca en el Mundial.
Sería prácticamente imposible en un artículo nombrar todas y cada una de las novedades que traerá dicho modelo, pero obviamente el motor, las suspensiones y el apartado aerodinámico serán los principales beneficiados de dicho cambio. El nuevo i20 Coupé WRC también se verá beneficiado por el aligerado de peso propuesto por la Federación Internacional. Hasta que se produzca dicho debut (los primeros test se esperan para febrero y el primer rally podría ser Finlandia o Alemania en agosto), Hyundai utilizará un coche de transición, con una pequeña mejora en el propulsor cifrada en 8 CV más de potencia, así como cambios en la suspensión trasera y el ya mencionado cambio de levas.
