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Toro Rosso es la victima olvidada de la crisis de los motores

Si nos paramos a pensar en quién está siendo la revelación de esta temporada, creo que todos estaremos de acuerdo con que los dos jóvenes pilotos de Toro Rosso están heredando este particular título que consiguió Daniel Ricciardo en 2014. Los de Faenza están realizando un gran año cuando muchos no esperaban dichos resultados con un equipo formado por dos rookies, pero ahora se encuentran con la incertidumbre de qué pasará con ellos en 2016.

Mientras que de Red Bull se está hablando mucho sobre sus posibilidades de montar una unidad de potencia Ferrari, ya que tras la confirmación de Manor con Mercedes-Benz, el actual reglamento cierra las puertas a que ellos también puedan ser motorizados por el gigante de la estrella, Toro Rosso sigue sin tener motor. Ahora, una de las alternativas le ha dado un “no” público que seguro que a más de uno no le ha gustado.

Honda, que sonó hace tiempo como posible alternativa, suministrándole motores de forma gratuita a la escudería italiana, pero desde el fabricante japonés han negado dichas informaciones y han reafirmado que no están dispuestos a suministrar a un segundo equipo sus productos hasta por lo menos la temporada 2017. Tanto Ferrari como Honda aseguran que es demasiado tarde para acordar el proveer motores actualizados a 2016 para ambos equipos, y en el caso de Ferrari dejan caer que la única solución sería dar los de 2015.

Sin embargo, desde algunos medios empiezan a deslizar que Red Bull podría echar mano del artículo 28.5 del reglamento deportivo, por el cual, un fabricante de motores solo puede suministrar unidades de potencia idénticas a la unidad de fábrica entre las temporadas 2016 y 2020, lo que impediría a Ferrari motorizar a los de las bebidas energéticas con su motor de este año y que a la postre también podría obligar a Mercedes AMG a montar motores 2016 en Manor.

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