Super GT Autopolis: Doble doblete y título de GT300 para Nissan

La cita de Autopolis del Super GT prometía emociones fuertes y aunque seguramente hubo en pista algo menos de acción de la que muchos habrían deseado las cosas han quedado interesantes para la última carrera del año en Motegi… en GT500, puesto que André Couto se proclamó ya campeón del GT300 tras un año dominante. Para Nissan, fue la guinda del pastel de un día espectacular con dobletes en ambas categorías. Parece difícil pararles en un año en el que el GT-R está intratable.

GT500: Nissan firma un doblete y se lanza a por el título

La particularidad de esta carrera era que en Autopolis, los coches competirían con la mitad de lastre que el que les correspondría. Si normalmente se dobla en número de kilogramos el número de puntos, en la penúltima cita del año se usa el mismo número como anticipación a la cita de Motegi, en la que los coches volverán a ir libres de lastre por primera vez desde la primera carrera del año. Con este panorama, el Nissan Calsonic marcó una pole position que convirtió en el liderato de carrera gracias a una buena arrancada de João Paulo de Oliveira.

Lo que parecía estar cerca de convertirse en un dominio inicial del Nissan número 12 acabó con un poco más de tensión gracias al buen hacer de Yuji Tachikawa con el Lexus Zent, persiguiendo al líder de carrera. Tras él, el Nissan de NISMO fue acercándose vuelta tras vuelta hasta llegar al punto en que los tres primeros clasificados estaban separados por apenas un segundo. La situación duró poco y el error del Lexus que le llevó fuera de pista acabó por romper el grupo.

Afortunadamente para los aficionados, siguió habiendo lucha por la primera posición, puesto que el Nissan número 1 con Ronnie Quintarelli al volante logró seguir de cerca al líder. No fue hasta la vuelta 41, tras las paradas y con Tsugio Matusda al volante del número 1, que se produjo el cambio de líder. El piloto japonés consiguió adelantar al reconocible Nissan azul y empezó a marcar el ritmo durante el último tercio de carrera, mientras por detrás el Lexus Petronas del equipo TOM’S intentaba optar a algo más que una nada despreciable tercera posición.

La dura pugna entre los Nissan les llevó incluso a contactar cuando Hironobu Yasuda intentó sorprender a su compatriota. El Nissan NISMO mantuvo la cabeza de carrera y acabó llevándose su segunda victoria del año, mientras el Nissan Calsonic una vez más estuvo arriba pero sin llegar a ganar. El podio lo completó el Lexus Zent, otro de los candidatos al título para la última cita en Motegi. La próxima carrera llegará sin lastre y con los Nissan como grandes favoritos.

GT300: Nissan, nuevo doblete y nuevo campeón

A pesar de la gran ventaja de puntos con la que el Nissan GT-R del equipo Gainer afrontaba la cita de Autopolis, el GT300 prometía una lucha espectacular, como siempre. Aunque el lastre reducido «amenazaba» con sacudir un poco las cosas y al final la sesión clasificatoria tuvo algunas sorpresas como la pole position del Lotus Evora. Un nuevo chasis estándar en primera posición el sábado tras lo ocurrido en Sugo era una gran noticia, justo lo contrario que lo que se llevaron los chicos del Toyota Prius del equipo apr.

A pesar de ser segundos en la sesión clasificatoria, tuvieron que acabar saliendo del pitlane. Esto ayudó a que el Lotus número 2 consiguiera escaparse nada más empezar la carrera, demostrando un ritmo espectacular a lo largo de toda la carrera. Al llegar al ecuador de la misma, la ventaja con respecto al segundo clasificado era de cerca de medio minuto, algo que aunque no es nuevo en el GT300, sí es inusual sobre todo para un equipo al que tradicionalmente le ha costado estar arriba.

A medida que la carrera iba avanzando, el Nissan número 3 con Kazuki Hoshino y Mitsunori Takaboshi al volante fue recuperando segundos con respecto al líder y a falta de 17 vueltas para el final, se produjo lo inevitable con el adelantamiento del claramente más competitivo GT-R, ayudado por los neumáticos fríos del hasta entonces líder después de su parada a boxes y con la pista fría a causa de la ligera lluvia que estaba cayendo sobre el trazado. En cuanto recuperó la temperatura, la pérdida de tiempo desapareció… aunque con el coche de NDDP en cabeza.

Pero la sorpresa de la carrera estaba aún por llegar cuando el Lotus Evora sufrió un pinchazo mientras aguantaba una merecida segunda posición. Esto dejó al Nissan del equipo Gainer en esa segunda posición que acabó confirmando bajo la bandera de cuadros por detrás del NDDP ganador. El podio lo completó el BMW Z4 del equipo Studie tras una espectacular lucha con el siempre popular Honda CR-Z del equipo ARTA en los compases finales. En cuanto al título, André Couto pudo celebrarlo a falta de la última carrera, convirtiéndose en el último campeón en solitario desde el año 2000.

Mejores momentos

Clasificación general GT500

Clasificación general GT300

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