Ford acaba de anunciar que ya se encuentran disponibles las nuevos Ford S-MAX Hybrid y Ford Galaxy Hybrid, con unos precios que arrancan en el 40.838 € en el primer caso y 47.338 € en el segundo. Se trata de la nueva motorización híbrida no enchufable de 190 CV que esencialmente es la misma que probamos en el Ford Kuga Hybrid que participó en nuestra videocomparativa C-SUV, convirtiéndose así en una gran alternativa a las versiones diésel de ambos monovolúmenes, sobre todo para un uso urbano.
Los S-MAX y Galaxy híbridos cuentan con 190 CV y cambio CVT
Esta mecánica híbrida no enchufable, y por tanto portadora de la etiqueta ECO de la DGT, desarrolla una potencia total de 190 CV. Está formada por un bloque de gasolina de 2,5 litros de cilindrada y ciclo Atkinson junto a un motor eléctrico que también ataca a las ruedas delanteras, y mediante el cual es posible iniciar la marcha en modo completamente eléctrico. Este motor se alimenta de una batería de iones de iones de litio de 1,1 kWh de capacidad bruta formada por 60 celdas y que se encuentra alojada majo el maletero.
Según Ford, gracias al uso de refrigeración líquida se ha podido disponer todas esas celdas de forma muy compacta, lo que permite ocupar el menor espacio posible, además de diseñar un nuevo tramo final de escape doble para sortearla. Esto permite que ambos monovolúmenes pueden cargar bultos de hasta un metro de altura, y que en configuración de siete plazas ofrezcan un maletero de 285 litros en el S-Max y 300 litros en el Galaxy, capacidad que puede aumentar abatiendo los asientos hasta los 2.200 y 2.339 litros, respectivamente, lo que efectivamente no supone merma de cubicaje en el espacio de carga.
El apartado mecánico se completa con un cambio automático CVT denominado power-split, el cual simula contar con diferentes velocidades teniendo distintas posiciones prefijada, para así poder disimular la desagradable sensación de conducción de este tipo de transmisiones. En nuestra prueba del Ford Kuga Hybrid, que como hemos dicho, equipa esencialmente el mismo tren motopropulsor (a diferencia del 4×4), esa sensación existía, sobre todo en aceleraciones o conducción más animada, aunque viajando de forma sosegada o por ciudad es perfectísimamente asumible.
Dos alternativas a sus rivales diésel y a grandes SUV
Así pues, en el caso del S-Max consigue un consumo combinado de 6,4 l/100 km según el ciclo WLTP y un 0 a 100 en 9,8 segundos, siendo el precio sin descuentos de 40.838 € para el acabado Trend, lo que lo sitúa unos 800 € más económico que el turbodiésel de 150 CV. Dicho importe asciende hasta los 43.363 € del acabado Titanium, 45.463 € del ST-Line y los 50.613 € del Vignale. En cuanto al Galaxy, que homologa un consumo de 6,4-6,5 l/100 km y un 0 a 100 km/h en 10 segundos, sólo está disponible en acabado Titanium por 47.338 €.
Con esta maniobra Ford consigue cubrir un hueco de mercado, que si bien será testimonial, Renault aún no cubre con el Grand Scenic ni Espace, ni tampoco otras alternativas como la SEAT Alhambra ni la Volkswagen Sharan, y que de momento está en manos de SUVs de gran formato como el Toyota Highlander Electric Hybrid, que aunque muy espaciosos, no cuentan con la practicidad ni versatilidad de un monovolumen.
Ford S-MAX 
