Convertido en uno de los SUV más interesantes dentro del segmento de los todocamino premium de tamaño medio, el Mazda CX-5 acaba de confirmar que conocerá una nueva generación. El popular SUV de Mazda no estrenará actualización hasta 2025, sin embargo esta revisión podría traer consigo una importante novedad en forma de motor híbrido, y es que la colaboración entre Mazda y Toyota es lo suficientemente interesante como para pensar en un CX-5 con consumos de gasolina realmente bajos.
Con la llegada del Mazda CX-60 y el lanzamiento de un CX-50 en mercados como Estados Unidos, las dudas sobre la continuidad del CX-5 parecían hasta cierto punto razonables. Sin embargo Mazda se ha apresurado a confirmar, no sólo la continuidad del CX-5 dentro de su gama con el desarrollo de una tercera generación, sino la llegada de importantes novedades en el modelo.
Debemos tener en cuenta que el CX-5 es uno de los coches de mayor éxito comercial de Mazda a nivel global, lo que respalda claramente el que la marca esté decidida a renovarlo. Pero con la evolución del mercado, especialmente el europeo, Mazda tiene ante sí el reto de subir un peldaño en electrificación, algo que por ejemplo ha quedado demostrado con el lanzamiento de su primer híbrido enchufable de manos del CX-60 PHEV.
Si bien tendremos que esperar hasta 2025 para descubrir todos los detalles sobre el nuevo Mazda CX-5, todo apunta a la llegada de una nueva gama de motores híbridos gasolina de 4 cilindos, unos propulsores que irán más allá de lo que permiten los actuales sistemas microhíbridos. Sin embargo, en lugar de desarrollar estos nuevos motores de forma independiente, Mazda podría echar mano de sus lazos con Toyota, empleando alguno de sus motores híbridos, esos mismos que impulsan coches como el Toyota RAV4 o el Lexus NX.
En estos momentos Mazda ya hace uso de esta alianza con Toyota, fabricando de forma conjunta el CX-50 en la planta MTM en Estados Unidos o comercializando en Europa un Mazda2 Hybrid que no deja de ser un Toyota Yaris híbrido bajo los emblemas de Mazda.
Fuente: Drive
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