Esta semana se presentaba el nuevo Volkswagen Golf. Llegaba la séptima generación del compacto de Volkwagen, una nueva generación que estrenaba la plataforma modular transversal del grupo, la plataforma MQB y con ella un buen número de soluciones para mejorar su eficiencia. Soluciones que en el exterior llegaban acompañadas de una estética no exenta de polémica.
Su diseño exterior ha sido señalado como continuista, “nada nuevo” era lo que se extraía de muchos de los comentarios que nos dejabais sobre el modelo el mismo día de la presentación. Hoy, vamos a analizar este cambio estético y ya que su llegada supone la materialización del trío del grupo VAG, con el Golf, el Audi A3 y el Seat León, vamos a comparar su diseño, tanto exterior como interior, también con sus compañeros.
¿Continuista? Si en concepto
La línea general del Golf si puede ser señalada como continuista, desde luego, la línea general sería fácilmente reconocible desde lejos como un Golf. Si nos encontrásemos un Golf VII por la calle y desconociésemos la llegada de esta nueva generación, por lo menos podríamos señalar que se trata de un Golf ¿podemos hacer eso con cada nueva generación con otros modelos? Nos costaría mucho más o directamente no podríamos.
Volkswagen en definitiva se ha encargado de evolucionar una línea con rasgos totalmente nuevos, un diseño general con un aspecto ligado a la tradición de la línea del Golf adaptada a los nuevos aires de la marca, pasando de las líneas curvas de las generaciones V y VI a un diseño de nervios más rectos, más propio de la gama de productos actual de la marca, por ejemplo del Polo o del Jetta.
¿Continuista entonces? Sí, al fin y al cabo es la continuación de una saga ya de 7 generaciones que han convertido al Golf en un icono para el mundo del motor. Continuista pero debidamente adaptado, puesto al día y adoptando los nuevos rasgos de la gama.
¿Hay algo de malo en ser continuista?
Hablamos del termino “continuista” desde una perspectiva negativa, pero ni lo es, ni lo tiene que ser. Se esperaba un importante cambio en el nuevo Golf, así os lo contaba también en el artículo que sacábamos unos días antes de la llegada de este Golf VII en el que señalaba los detalles que podíamos esperar de la nueva generación del Golf y ese importante cambio ha estado presente por un lado en la adaptación a la línea del Golf de los nuevos rasgos más rectos de la marca, por otro lado en unas nuevas dimensiones y por último y lo más importante, en una nueva plataforma y una nueva tecnología como la desconexión de cilindros o los nuevos sistemas de seguridad de serie.
Desde luego el cambio ha sido más profundo que el que experimentamos entre el Golf V y el Golf VI como se esperaba, al igual que podíamos esperar un diseño continuista, algo que forma parte de cada nuevo modelo en la marca, como marca alemana que es, forma parte de su cultura de diseño, de su filosofía a la hora de abordar un nuevo producto. Sí es útil y eficaz en su cometido, ¿por qué un cambio profundo?
Quizá había demasiadas expectativas en un cambio más profundo del experimentado pero no hubiera sido lo más propio de Volkswagen. Ni de Audi. Ni de BMW. Ni de en definitiva la tendencia de diseño alemana ¿y Mercedes con el Clase A? Bien, ese cambio, ese “algo está pasando en Mercedes”, responde, podríamos decir que básicamente, al fin de la utilidad del producto, al fin de la efectividad del Mercedes Clase A anterior. El diseño se había encargado de convertir al Clase A en un producto ineficiente en su segmento y en el mercado y por tanto tenía que cambiar.
Golf VI y Golf VII: frente a frente
Bien, hemos dicho que es continuista. Vale, enfrentemos entonces a esta nueva generación con la generación saliente. En diseño, el mencionado paso de las líneas redondas (atención por ejemplo a las líneas del capó o el aspecto de las ópticas), pero además, el nuevo Golf crece, es más largo, 56 mm más, llegando a los 4255 mm, la distancia entre ejes es mayor, 59 mm más, alcanzando los 2.637 y es más ancho, 13 mm más, con 1.799 mm en total.
En su interior la tónica es la misma en cuanto al aumento de dimensiones se refiere. El espacio para las piertas en la butaca trasera crece en 15 mm, crece también el espacio a la altura de los hombros, con 30 mm en las plazas traseras y 31 mm en las delanteras y su maletero es mayor, 30 litro más, quedándose en 380 litros.
Pero también reduce cotas, su altura, que pasa a ser ahora de 1.452 mm, lo que supone una reducción de 28 mm, algo, que además de en el diseño repercute en la aerodinámica, que mejora en un 10% con un coeficiente de 0.27. También se reduce la altura de la boca de carga del maletero, en 685 mm y por supuesto su peso, dato que ya hemos abordado en múltiples ocasiones. Recordemos que pierde 100 kg.
Golf VII, Seat León y Audi A3: la renovación de una familia de compactos
Llega la séptima generación del Volkswagen Golf, pero antes, durante los últimos meses, hemos vivido también la renovación del Seat León y del Audi A3, este el primero del trío en ser renovado y el primero de los tres en pasar por nuestras manos para probarlo.
Tres modelos que se han renovado por completo. El Audi en febrero, el Seat hace bastante menos, a mediados de julio, dejándonos en ambos casos con dos formas de entender la renovación de un modelo. Por un lado, el caso del Audi A3, semejante en idea al del Volkswagen Golf, mismo concepto, líneas parejas a su predecesor, pero una importante puesta a punto para adaptar el modelo a los nuevos tiempos y una importante actualización mecánica que llegaba partiendo de la plataforma MQB.
Una plataforma que también nos encontramos en el Seat León, que frente a la evolución más conservadora de los alemanes apuesta por un cambio más importante e incluso un enfoque más pasional, más “latino”, también adoptando las líneas más rectas de la gama, presentadas en el nuevo Ibiza.
En su interior tres filosofías. Por un lado la más sencilla del León, un diseño más sencillo pero que gana respecto a su predecesor, por otro lado la filosofía del Golf de aires más clásicos, con una buena combinación entre elementos en plástico negro brillante y aluminio y por último el Audi A3, que presenta un mejor acabado al tacto, pero en apariencia se muestra mucho más juvenil que el Golf, también más sencillo, más minimalista.
Su diseño, su aspecto conservador, toda la nueva tecnología y la mayor practicidad; parte de la filosofía alemana
Sí, el Golf es continuista en concepto, en lineas generales, esa es parte de su “personalidad”. No nos podemos olvidar de que el Volkswagen Golf es todo un icono. Tiene una importante identidad. Es un referente en el segmento y simplemente su nombre ya es argumento de compra para mucho ¿por qué no seguir con el legado de 6 generaciones?¿por qué romper con todo ahora?
Podemos apuntar al Golf como conservador, pero sólo en diseño, bajo la carrocería tiene un buen aporte de nuevos argumentos para rebatir eso y además, sobre el papel ya está ofreciendo una mejora en habitbilidad y en eficiencia. Una imagen conservadora pero mejorando su utilidad, es más un diseño relegado a la utilidad, no un producto basado en el diseño, eso es Alemania. Quizá el fallo ante los comentarios tan críticos que ha recibido está en que se esperaba un cambio que conociendo a Volkswagen, conociendo la filosofía de diseño alemán, no habría cabido esperar.
¿Cuándo llegará el nuevo Volkswagen Golf?
Su comercialización se iniciará el próximo mes, a partir de octubre ya se podrá pedir, produciéndose las primeras entregas a comienzos de 2013. Por el momento no hay datos para España, se ha habilitado ya un espacio en su página web pero no está disponible el configurador y tampoco se ha comunicado el listado de precios y gama para España, si se ha hecho en Alemania. No deberían tardar demasiado los precios para España. El precio de partida para Alemania es de 16.975 euros.
En Diariomotor: Volkswagen Golf VII 2013, a fondo| Gama y precios del nuevo Volkswagen Golf VII para Alemania: el Golf nos muestra su carrocería 3 puertas
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