Un coche como un Rolls-Royce Phantom Series II – recientemente renovado – no es precisamente un vehículo de flota. Se trata de una berlina de superlujo altamente personalizada. No es un coche presente en flotas de empresa o alquiler. ¿O quizá sí? Normalmente no sería noticia que se vendiesen abundantes Phantom en China, pero sí es noticia que la cadena hotelera Sands China Ltd. haya comprado cinco unidades de batalla larga al mismo tiempo. Hablamos de una inversión que superaría los 2,5 millones de euros en Europa.
Teniendo en cuenta los impuestos a los que están sometidos los bienes de lujo extranjeros en China, es posible que el montante de la operación haya superado con creces los cinco millones. La cadena hotelera los usará como “lanzaderas” VIP para clientes multimillonarios, recordemos que en China hay un millón de multimillonarios dispuestos a gastar dinero a espuertas. Los coches, altamente personalizados, se han pintado en color Paiza Brown, el tono corporativo de Sands. No hay detalles sobre los nuevos detalles de los interiores.
El único dato que ha trascendido es la instalación de una mampara que separa las plazas traseras de las delanteras, para garantizar la privacidad de los pasajeros. No queremos desaprovechar la ocasión para recordar el que fue el mayor encargo de Rolls-Royce de la historia. En el año 2006 el Hotel Hong Kong Peninsula compró 14 unidades de Phantom, valoradas en su conjunto en más de 6 millones de euros, impuestos no incluidos. Todos los vehículos fueron personalizados con los colores del hotel y de nuevo, eran para llevar y traer a clientes VIP.
Desde España e incluso desde Europa nos choca este tipo de coches en estos hoteles. Los mejores hoteles de Madrid pueden tener Mercedes Clase S o BMW Serie 7 para llevar a sus clientes más importantes, pero desde luego ni siquiera el Ritz tiene un Rolls-Royce Phantom, y menos aún 14 unidades idénticas.
Fuente: Rolls-Royce
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