La penúltima fecha de la IndyCar dejó todo servido para que Sonoma vuelva a ser el escenario donde se defina el título de la temporada. En una carrera con varias alternativas, la fecha en Watkins Glen, en lugar de consolidar el liderato de Josef Newgarden, quien venía pilotando con mucha solvencia en los cuatro últimos eventos, observó como se complicó con un sorprendente error en su última parada en boxes que le relegó hasta el lugar 18, en tanto su máximo rival para el título, Scott Dixon, llegó en el segundo lugar. Un día redondo para Honda ya que además del triunfo de Alexander Rossi, quien previamente había anunciado su renovación con Andretti, y el segundo lugar de Dixon, Ryan Hunter-Reay completó el podio.
En una carrera que inició con el asfalto mojado, Rossi partió desde la pole y a pesar de ceder momentáneamente su liderazgo durante unos metros, ante Josef Newgarden, pronto recuperó el comando hasta la primera detención para cambiar neumáticos de lluvia a slicks. Helio Castroneves asumió el liderazgo por delante de Max Chilton y JR Hildebrand, quienes esperaron una vuelta más que el resto de los pilotos para realizar el cambio de neumáticos. No obstante, Rossi, quien regresó a pista en el puesto nueve, exhibía un ritmo superior al de sus rivales y una vez reagrupados, tras una bandera amarilla provocada por James Hinchcliffe, pudo situarse a la estela del líder. Así que en el reinicio, Castroneves y Rossi pelearon por la punta, seguidos de Newgarden, Dixon y Hunter-Reay.
Cumplido un cuarto del recorrido, Takuma Sato provocó otra bandera amarilla, ocasión que aprovecharon los líderes para repostar y cambiar neumáticos. Es en esta detención cuando se advierte que los asistentes de Alexander Rossi tuvieron problemas con el surtidor de combustible, así que no pudieron completar la cantidad programada. Aún así, el ganador de las 500 Millas de Indianápolis en su edición 2016 se abrió paso entre el lote y avanzó con fuerzas para desplazar a Spencer Pigot, Max Chilton, Marco Andretti, JR Hildebrand y Jack Harvey.
la detención adicional de Rossi no representó mayor tropiezo para sus intenciones ya que la suerte le sonrió. Otra nueva bandera amarilla en la vuelta 28 propició que los líderes para ese momento, Helio Castroneves, Ryan Hunter-Reay, Scott Dixon, Marco Andretti y Josef Newgarden entraron a boxes y es a partir de allí que Rossi ascendió hasta la punta, dejando a Pigot, Chilton y Hildebrand entre él y el lote de perseguidores que reinició su carrera. En la vuelta 39 Scott Dixon pasó a Hunter-Reay y avanzó con fuerzas en busca del puntero con una ronda de detenciones por realizar.
A 18 vueltas para culminar la carrera, Rossi entró a pits y Dixon asumió la delantera, seguido por Hunter-Reay, Castroneves y Newgarden. Es en este turno cuando el más joven piloto de Penske cometió un error incomprensible porque con neumáticos fríos intentó una maniobra arriesgada sobre su compañero Will Power y se estrelló contra las barreras de protección. En el mismo movimiento salió a pista y fue chocado en la parte posterior por Sebastien Bourdais, situación que le llevó de nuevo a boxes para revisión y reparación.
En la cima de la carrera, Rossi impuso su ritmo y se mantuvo inalcanzable para un Scott Dixon que lo intentó pero al final se resignó a sumar unos muy valiosos puntos para el campeonato. Ahora la ventaja de Newgarden se ha reducido a solo tres puntos. Por detrás de los tres pilotos del podio, finalizaron Castroneves, Rahal, Power, Kimball, Chilton, Pagenaud y Muñoz. La IndyCar se definirá el próximo 17 de septiembre y con la opción de puntos dobles, además de Newgarden y Dixon, otros potenciales candidatos al título serían Hélio Castroneves, Simon Pagenaud y Will Power.
Vía | Motorsport Total
