Audi Sport quiere que cambies tu forma de ver los Audi más deportivos. Aunque ya nos habíamos hecho a la idea de que hablar de altas prestaciones en Audi estaba ligado al sello quattro por obligación, el rebautizo de quattro GmbH a Audi Sport ya dejó entrever que el futuro estaba más allá de la tracción integral. Y tan solo unos meses después el Audi R8 recibe su versión más pasional bajo el sello Audi R8 RWS, una declaración de intenciones que adelanta que en el futuro de Audi no todo será quattro, y no solo para ofrecer más diversión, sino también para desafiar a la competencia.
Desde que llegó la segunda generación del Audi R8, la por entonces quattro GmbH admitió haberse quitado de encima los complejos con respecto a sus rivales. El concepto de superdeportivo para todos los días había calado y el Audi R8 había convencido a público y crítica, motivo por el que la evolución debía conducirse a través del difícil proceso de medirse a la competencia en igualdad de condiciones. De este modo el Lamborghini Huracán y el Audi R8 se presentaron con las mismas cartas sobre el tablero, cada uno haciendo valer su emblema y carácter, pero ahora sí, jugando en la misma liga.
De esta guisa el Audi R8 (II) nos convenció desde el primer instante en el que nos subimos a él. Seguía siendo el superdeportivo apto para todos los públicos, sin esas brusquedades que te ponen en aprietos, pero ahora ofrecía un límite mucho más alto en prestaciones y sensaciones, lo que lo convertían en un rival a la altura de Lamborghini Huracán, McLaren 570S, Jaguar F-Type y Mercedes-AMG GT. Pero esa competencia juega muy duro poniendo en el mercado mucho carácter y diversión, tanto como para obligar al Audi R8 a reaccionar dejando a un lado sus buenas maneras.
De este modo la presentación de la nueva Audi Sport trajo consigo el anuncio de más modelos y la apuesta por conceptos diferentes, y cuando decían diferentes, querían decir sin quattro. Audi Sport entendió que la demanda de más carácter que solicitaban sus clientes no podía llegar en un coche donde el tren delantero corrige todo los excesos del tren trasero, así que la decisión fue tajante prescindiendo del grupo de reenvío hacia el tren delantero. Una fórmula que al Lamborghini Huracán LP580-2 le funciona a las mil maravillas en el ámbito comercial, y que ahora Audi va a explotar con el lanzamiento del R8 RWS en edición limitada de 999 unidades.
Desde el punto de vista técnico el Audi R8 RWS se centra en la eliminación de la tracción sobre el tren delantero. Esta eliminación consigue reducir en 50 Kg el peso del conjunto en la versión coupé, pero además supone dar todo el protagonismo al tren trasero a la hora de digerir los 540 Nm y 540 CV que ofrecen su V10. Y no contentos con ello, para enfatizar la nueva condición de tracción trasera, Audi Sport diseñó un setup específico para suspensiones, dirección y controles electrónicos, lo que finalmente tiene como resultado un Audi R8 que deja a un lado la precisión milimétrica para hacer sus primeros pinitos en el sobreviraje.
Audi Sport no pretende erradicar la tracción total quattro de su gama, nada más lejos de la realidad, pero sí pretende apostar por nuevos conceptos, series limitadas y en definitiva coches más exclusivos que se alejen de la Audi más convencional. Fabricar un Audi R8 de tracción trasera es un movimiento ambicioso, eliminando no sólo la tracción total, sino apostando por ofrecer un lado divertido y más «purista»… en un ¡Audi! Y es que a día de hoy, no debemos olvidar que es justamente Audi la que defiende a través del R8 RWS uno de los planteamiento más puristas de su segmento, haciendo uso de todo un V10 atmosférico al que ahora le suma un único eje de tracción. Si ya le ponen un cambio manual, el Audi R8 pasará a ser una leyenda sin rival para todos los petrolheads.
Y si aún dudas de que Audi Sport haya conseguido hacer del Audi R8 RWS ese superdeportivo divertido que tanto demandábamos, no te vayas muy lejos porque en sólo unos días nos subimos a él para contarte nuestras impresiones en primera persona.
Audi R8 
