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El BMW M5 E39 Touring que los bávaros nunca fabricaron, a la venta en Estados Unidos

El BMW M5 E39 está considerado uno de los coches más equilibrados de su época, el patrón de oro de la berlina deportiva, por así decirlo. Equipado con un motor V8 de 5,0 litros y 400 CV, así como un cambio manual, se nos ocurren pocas formas mejores de afrontar un viaje en Autobahn, divertirse en una carretera revirada, y conducir a diario. Si hay una queja de los BMW M5 E39, es que BMW nunca los ofreció con carrocería familiar. BMW sí había ofrecido los M5 E34 – en mi opinión, el M5 más perfecto jamás fabricado – con carrocería familiar, dejando un hueco en el corazón de los aficionados con el E39. Hasta ahora.

Está a la venta en Estados Unidos por 22.500 dólares. Un precio moderado para un coche absolutamente único.

Por supuesto, no hablamos de un BMW M3 E39 Touring de fábrica, ni siquiera de un Touring creado de forma experimental por BMW, hablamos de una máquina creada por un aficionado a la marca. Pero en este caso, ha sido creada con tanto detalle y mimo que merece tener su propio espacio en la portada de Diariomotor. El coche en cuestión está situado en Illinois (Estados Unidos) y se encuentra a la venta por 22.500 dólares, un precio dos veces superior al de un M5 E39 con carrocería de cuatro puertas. Como podréis suponer, no nació como un BMW M5, al que le creció una joroba. Nació como un BMW 540i Touring en 2001.

El anterior propietario al concesionario que lo vende fue el que se encargó de extraer de un BMW M5 donante – posiblemente accidentado – el motor (ese maravilloso S62 de 400 CV), caja de cambios manual e interior. Posteriormente, los transplantó al BMW 540i, donde encajaron sin problema alguno. A continuación, tuvo que modificar el kit de carrocería del 540i Touring, especialmente para hacer encajar en el paragolpes posterior las cuatro colas de escape del BMW M5. También tuvo que instalar los faros adecuados, así como el paragolpes delantero del BMW M5. La suspensión también ha sido modificada, con nuevos amortiguadores delanteros.

Como este BMW 540i Touring tenía una suspensión trasera autonivelante, se ha ajustado su nivel estándar para dar al coche una presencia adecuada. No obstante, los frenos sí son los que el 540i montaba de serie. Si el nuevo comprador desea desatar el potencial del motor o meterse en circuito, le recomendamos que reemplace los frenos por los de un BMW M5. En cualquier caso, el resultado final llama la atención por su calidad, así como por lo fiel que es al BMW M5. Un profano – uno que no supiese de la ausencia de M5 E39 Touring de producción – no sabría que se trata de una conversión.

Fuente: BaT
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